Un "caos", una situación "con tintes de pesadilla", un "error" cuyas consecuencias se dejarán sentir durante muchos años. Con esta dureza describen las AMPAS Coordinadas de Tenerife el momento por el que atraviesa la educación pública en Canarias. Para tratar de poner remedio, este grupo de asociaciones de padres muy críticas con la gestión del Gobierno autónomo llevará al Parlamento regional -junto a otros colectivos del Archipiélago- una iniciativa legislativa popular (ILP) en la que plasmarán sus propuestas, que pasan, entre otros aspectos, por una mejora de la inversión para las políticas educativas o la reducción del número de alumnos por clase.
Dos de los representantes de AMPAS Coordinadas, Pablo Santana y Luisa Tamayo, evaluaron de forma negativa el curso recién finalizado, marcado, a su juicio, por diferentes problemas; entre ellos, la mala gestión de las sustituciones del profesorado -se han nombrado la mitad que en el curso anterior y muchas veces después de los 15 días- y un enfoque "elitista" de la enseñanza bilingüe "consistente en seleccionar a los mejores alumnos".
La perspectiva del próximo curso no es mejor, según este colectivo. Así, sostienen que "se han producido bastantes problemas en la admisión de alumnos en Secundaria y Bachillerato y que habrá "nuevos recortes en Formación Profesional". También denuncian la "supresión de medidas de refuer- zo y atención a la diversidad", el "desmantelamiento" de los centros de adulto y la eliminación del programa de centros de atención preferente.
Respecto a este último punto, lo que ha hecho el Gobierno autónomo es acogerse al programa del Ministerio (PROA) una vez finalice el autonómico (Procap). En este sentido, Santana recordó que el programa canario incluía "compromisos definidos y vinculantes" para la Administración, redujo las ratios de alumnos y destinó trabajadores sociales a todos los centros preferentes y que, al "cargárselo", la Consejería establece otro "más barato y menos efectivo".
Pese a lo que opina el Gobierno, AMPAS Coordinadas atribuye los malos resultados obtenidos por los alumnos canarios en la reciente Evaluación General de Diagnóstico a que "la inversión durante los últimos años no ha sido la que debería haberse realizado". También insistieron en que las ratios de alumnos por profesor de las Islas son de las más elevadas del país.
"La Consejería ha dicho que apostará por la formación del profesorado, pero al mismo tiempo ha suprimido planes y proyectos de mejora en los centros", denunciaron los miembros del colectivo, para quienes la consejera Milagros Luis actúa "como si los profesionales de la educación" fueran los culpables de los malos resultados.