Seis meses, cinco víctimas mortales por violencia de género en el archipiélago; un dato que iguala al total de 2009 y que coloca Canarias como la segunda comunidad autónoma en número de mujeres muertas a manos de sus parejas o ex parejas de todo el país, superada tan sólo por Andalucía, en donde se elevan a nueve.

En el caso canario se da la peculiaridad de que tres de las mujeres asesinadas eran extranjeras y no habían denunciado con anterioridad a su agresor, mientras que las dos víctimas nacionales sí lo habían hecho, aunque hay que aclarar que en uno de los casos (el de La Guancha) la fallecida resultó ser la madre de la mujer maltratada, que contaba con una orden de alojamiento y no se encontraba en el domicilio familiar.

El primer caso del año se registró en el municipio tinerfeño de Granadilla cuando un ciudadano de origen ecuatoriano acabó con la vida de una mujer rusa asestándole varias puñaladas. En ese mismo municipio, pero en el mes de mayo, una ciudadana ecuatoriana moría por varios cortes en el cuello realizados con un arma blanca por su marido.

El 26 de abril una joven brasileña de 20 años aparecía muerta en su domicilio de Fuerteventura con un profundo corte en el cuello, las investigaciones policiales concluyeron que el autor había sido un conocido que se sentía atraído por ella desde hacía tiempo.

Ya en junio han sido dos las víctimas: una anciana del municipio tinerfeño de La Guancha a la que su ex yerno golpeó con un palo tras no encontrar en el domicilio familiar a su ex mujer, pese a tener una orden de alejamiento, y una señora que residía en el barrio de Taco a la que presuntamente asesinó su ex pareja sentimental.

Preguntada por el elevado caso de víctimas extranjeras, la directora del Instituto Canario de Igualdad (ICI), Isabel de Luis, indica que "en el ámbito cultural de determinados países la violencia de género no se aborda ni hay leyes que amparen a las mujeres, ni siquiera es un delito. Cuando llegan hay un proceso de adaptación, pero les cuesta aprovechar la oportunidad de que se les protege y de que pueden denunciar por temor a que eso les vaya a suponer una expulsión si están en situación ilegal, por eso sufren mayor vulnerabilidad y eso se traduce en los niveles elevados de víctimas de malos tratos en relación a su población". De Luis insiste en que en España el 40% de las víctimas son inmigrantes, "pero la cifra no se correlaciona con el peso que realmente tienen en el Estado, que no supera el 10%, lo indica su peculiaridad en este asunto".

De todas maneras, no se puede establecer el hecho de ser nacional o extranjero como un factor determinante, puesto que el año pasado se registraron cinco víctimas mortales y cuatro eran canarias, mientras que en otros años ha sido al revés, por lo que no existe ningún tipo de secuencia lógica.

Sin embargo, la cuestión que más preocupa al Instituto Canario de Igualdad (ICI) y a las organizaciones feministas es el hecho de que las mujeres sigan teniendo miedo o reparos a la hora denunciar a quienes las maltratan.

"La denuncia es una garantía de protección, porque de lo contrario ninguna institución conoce el caso ni puede establecer mecanismos de protección", recuerda de Luis, que insiste en que en Canarias "existe una amplia red de ayuda especializada a las mujeres que se pone en funcionamiento desde el mismo momento en que ella llama al teléfono de emergencias canario 1-1-2", insistiendo en que es un teléfono que mantiene el anonimato y "que va a ayudarla tanto si se encuentra en una situación extrema como si lo que desea es informarse sobre qué puede hacer para acabar con una situación a la que tal vez no encuentra salida".

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