MIEMBROS del PP de Llanos -hay otro PP- han puesto el grito en el cielo porque el patriota Mateo López, asesor de Zerolo en el Ayuntamiento de Santa Cruz, escribió un artículo en este periódico manifestándose partidario de la independencia de Canarias.

Bonito fuera que Llanos y Brito Arceo, esos concejales tan iletrados, se arrogaran el derecho de conducir el pensamiento político de los asesores del alcalde. Como si en este país los ciudadanos no pudieran elegir la naturaleza de sus ideas, por muy asesores que sean.

Mateo López tiene a gala ser independentista. Y Zerolo también, lo que ocurre es que por prudencia y por estrategia se tiene que callar, de momento. ¿También le van a quitar el cargo a Zerolo? Mateo hizo referencia aquí a un hecho redescubierto en estos días, cual fue el plan del teniente general García Escámez de separar Canarias de España para colocar como Rey de las Islas a don Juan de Borbón, padre del monarca actual. Un hecho que pasó desapercibido a la historia y que refleja en sus memorias el teniente general Francisco Franco Salgado-Aráujo, Pacón, primo del general Franco y jefe que fue de su Casa Militar. O sea, que escribía con conocimiento de causa.

Todo esto, señores, lo dice la historia y Mateo López se ha encargado de refrescarlo. Por lo demás, la Constitución no obliga a nadie a adoptar las ideas del PP. Que cada cual elija las suyas porque es en la pluralidad donde se encuentra la esencia de la democracia. Por eso lo de estos cachorrillos iletrados nos parece patético. Un señor que quiera abrazar el independentismo, lo abraza y punto.

Él, Mateo López, que sufrió prisión por sus ideas, ni siquiera escribió el artículo como asesor de Zerolo, sino como un ciudadano de a pie, enamorado de su tierra y de sus esencias, de su historia y de su papel ante ella. ¿Qué pasa?

Este periódico es plural. Es su línea editorial la que refleja el pensamiento de su director/propietario. De sus principales columnistas y de una masa de lectores cada vez más numerosa.

Para nosotros Canarias es una nación. Para nosotros las Islas son una religión. A ellas nos dedicamos con el ahínco del patriota, con la voluntad del esforzado ciudadano que quiere legar a sus hijos un trozo de historia y mucha dignidad.

Dejen, pues, a Mateo que exponga sus ideas. No se comporten como fascistas intentando quitar el pan, el sueldo y el cargo a un patriota porque no comparten lo que dice. Dejen vivir a la gente en paz. Dejen a cada cual que desarrolle su voluntad pacíficamente, como quieren hacer tantos patriotas canarios. Déjennos en paz.