«Chuzos de punta», la crónica de Cristo Hernández

SECCION: «CRÓNICA AMARILLA»

TÍTULO: «CHUZOS DE PUNTA»

AUTOR: CRISTO HERNÁNDEZ

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En la mañana del domingo cayeron chuzos de punta, dentro y fuera del Pabellón Santiago Martín de La Laguna, durante el partido que disputaron el Iberostar Tenerife y el Morabank Andorra, con victoria holgada de los insulares (83-56) que pudieron brindarle, por fin, el primer triunfo como locales a su parroquia.

El partido tuvo poca historia desde el punto de vista del conflicto en el marcador. Los aurinegros cobraron una sonora ventaja demasiado pronto (once puntos al final del primer cuarto) y un desesperado Joan Peñarroya no supo responder a la cátedra de Alejandro Martínez a pesar de que el preparador andorrano se había postulado desde el inicio de la temporada como un alumno aventajado de ese juego alegre y desinhibido que ya es seña de identidad aurinegra en todos los rincones de la Liga Endesa.

Desde el salto inicial ambos equipos jugaron a lo que sabían: un juego rápido y de posesiones cortas. Pero en este ejercicio de estilo el Iberostar Tenerife salía con ventaja en el día de hoy por la experiencia y calidad ofensiva de sus jugadores. Los andorranos quisieron suplantar a los tinerfeños con los trucos y artimañas del run and gun, pero en La Hamburguesa nos tenemos la lección bien aprendida y hoy era uno de esos típicos días laguneros, de frío y lluvia copiosos, que invitaban a finiquitar pronto el negocio para acudir al calor de la lumbre de un buen escaldón.

Bastó con incomodar un poco el juego de perímetro que tan buen resultado les venía dando a los andorranos hasta la fecha. De hecho, los puntos foráneos llegaron, en su mayor parte, de sus jugadores interiores (Ivanov, Bogris y Green) que supieron sacar ventaja de situaciones bajo un tablero que, no obstante, dominaron los tinerfeños de una manera casi tiránica en el apartado reboteador (40 a 25).

Con el partido resuelto, la preocupación de los espectadores se trasladó a los Hombres de Quico, ese otro equipo de voluntarios que velan por el buen estado del parqué durante los encuentros. Hoy tuvieron trabajo extra, porque al diluvio deportivo que caía sobre el banquillo andorrano se sumaba el otro que arreciaba afuera y dejaba en evidencia el estado de las instalaciones del Santiago Martín, víctima de las goteras.

No es éste el lugar para una filípica, pero no se puede estar parando un partido porque al señor constructor se le ocurrió ahorrarse unas perritas en el encofrado. Estamos en la ACB, con un equipo que se ha ganado con esfuerzo ser de ACB y unos socios y aficionados contribuyentes que gritan y animan a su equipo con el orgullo de ser de ACB. Y estas cosas dan mala imagen porque luego van y salen en los zapping de todo el mundo.

Con motivo de la celebración del 75ª aniversario de la fundación del CB Canarias, hoy presidían el palco de Los Majuelos todos los presidentes habidos y por haber. A ver si tomaron buena nota de lo acontecido hoy sobre el parqué, porque lo que ganan los deportistas sobre la cancha, luego van y lo pierden los políticos en los despachos. Y en el baloncesto tinerfeño quedan todavía algunos remiendos por resolver.

¡VAMOS CANARIAS!