Así fue el triunfo del Menorca en Melilla

El Menorca presume de plantilla

El conjunto de Berrocal sabe sufrir en los momentos clave y disfruta de una mayor profundidad de banquillo que un Melilla que dio guerra hasta el final, con un De Vries peligroso desde fuera

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Saber ganar. El Menorca obtuvo su decimoctava victoria en la LEB Oro en una complicada cancha – Melilla hoy

Importante triunfo en Melilla del Menorca Bàsquet, en un encuentro muy intenso y que estuvo vivo hasta el final. Los menorquines fueron casi siempre por delante en el luminoso, aunque en un buen tercer cuarto Melilla conseguía igualar la contienda y obligaba a los de Berrocal a echar el resto. Sin embargo, al final, se impuso la mayor profundidad de banquillo de un Menorca en el que las rotaciones resultaron letales y decisivas.

El partido comenzó con dos equipos muy fríos que se profesaban mucho respeto. Melilla se adelantó en el marcador, pero fue un espejismo ya que a partir de ahí, y aunque tardó dos minutos en anotar, Menorca fue capaz de meter un parcial de 0-9 a los melillenses. Los menorquinistas no estaban especialmente acertados en ataque, pero su rival pasaba todavía más apuros en esa faceta y el técnico local, Gonzalo García, se vio obligado a pedir tiempo muerto con 4-12 en el marcador. Melilla seguía sin despertar, aunque Devries anotaba el 6-14. Pero los norte africanos desperdiciaban demasiadas oportunidades de contragolpe ante fallos del equipo menorquín en el aro local, aunque una perfecta asistencia de Devries a Odiakosa terminó con dos puntos del nigeriano (8-16). A pesar de ello, el Menorca no bajó el ritmo y Navarro cerró el cuarto con dos tiros libres que ponían la ventaja en diez puntos (8-18).

En el segundo cuarto los dos equipos entraron más enchufados, aunque ahora a los menorquines les costaba mas frenar el juego de su rival y veían como Melilla, tras un 2+1 de Devries y dos puntos de Odiakosa, reducía la diferencia a cinco puntos (15-20), obligando a Berrocal a pedir un tiempo muerto a 7´01 para el descanso. Pero la salida del mismo no pudo ser peor para Menorca, ya que un triple de Devries ajustaba aún más el luminoso (18-20). Sin embargo, los menorquines lograron reajustarse e hicieron valer su calidad y sus buenas rotaciones para volver a tomar el mando del encuentro. Mientras, Melilla seguía sin aprovechar las opciones que le dejaba el rival con sus continuos errores en ataque. Así, dos puntos de Blanch y otros dos de Matali ponían el 20-27 a cuatro minutos. Melilla respondía con un triple de Suka, pero seguía sin terminar de entrar en el partido y, aunque Salva Arco reducía de nuevo la diferencia a dos puntos (25-27), daba poca sensación de peligro. Y así fue y Menorca, con un nuevo parcial de 0-8 se iba otra vez de diez puntos al final del cuarto (25-35).

El tercer cuarto estuvo marcado por la intensidad y la igualdad, aunque Melilla se mostró más efectivo. Habían saltado a la cancha decididos a igualar la contienda y así lo hicieron, poniéndose por delante por segunda vez (39-38) con un triple de Arco y dos tiros libres de Mkeither. Morentin devolvía la ventaja a los baleares desde la línea de 6’75 (39-41), y a partir de ahí el encuentro entraba en una fase de intercambio de canastas y constantes alternativas en el marcador. Arteaga era el referente del equipo de balear, mientras que en Melilla respondía Devries. Pívot y alero, un duelo de artilleros que se saldó con un empate a 50 puntos al final del cuarto.

Con todo, el último cuarto resultó trepidante, con Coppenrath brillando en las filas de un Menorca que mantenía siempre ligeras ventajas intentando superar la defensa desde el perímetro. Sin embargo, dos triples de Riera y Devries que ponían el 60-57. Pero Coppenrath y Arteaga, una pareja letal en el interior, mantenían con esperanzas a los visitantes (64-63).

Melilla logró entrar en los últimos 3 minutos con el marcador a favor (68-65) . Pero a partir de ahí el Menorca demostró su potencial y Otegi, Arteaga y Blanch volvieron a poner a los menorquines por delante (68-71) a falta de 2’12. Entonces, un triple del desaparecido Jiménez abría la renta definitiva en el luminoso (68-74). A partir de ahí, con 1’22 minutos por delante, al Menorca le bastó con administrar su ventaja para acabar llevándose la victoria ante un Melilla que luchó hasta el final.