El Área de Empleo del Ayuntamiento portuense puso en marcha esta semana un nuevo Plan de Empleo Especial que permite contratar temporalmente a 41 desempleados de larga duración. Los nuevos trabajadores municipales realizarán obras y prestación de servicios de interés general y social, y además recibirán formación en competencias básicas y de acceso a la ESO.
Este proyecto pretende dotar a los trabajadores de las herramientas necesarias para el acceso a la formación y al empleo. Durante seis meses recibirán, en el 40% de la jornada laboral, formación educativa. En el resto de su jornada, realizarán trabajos de interés público.
Para el alcalde portuense, Lope Afonso (PP), este nuevo plan de empleo permitirá dar "una nueva oportunidad a 41 vecinos del Puerto que se encontraban en una situación difícil, obteniendo una mayor cualificación profesional que haga que en el futuro puedan lograr una reinserción efectiva en el mercado laboral".
La concejala de Empleo, Antonia María Domínguez, destacó que el conocimiento y la capacitación son "las claves para poder insertarse en el mercado laboral", y recordó que se cierra el año con "casi un centenar de portuenses a las que se ha contratado, formado o ayudado a encontrar un empleo estable".
La plantilla de este proyecto la componen dos titulados en magisterio, dos albañiles oficiales de primera, un capataz, 18 peones de limpieza y 18 peones de la construcción. Estos trabajadores realizarán labores para acondicionar y embellecer diferentes espacios públicos, mejorar las condiciones de uso y mantenimiento de instalaciones y equipamientos municipales, limpiar zonas costeras y verdes del municipio, y mejorar y embellecer otros espacios públicos de interés.
Este nuevo Plan de Empleo tiene un coste total de 246.013 euros. Ha sido subvencionado por el Servicio Canario de Empleo (SCE) con 220.341 euros, mientras que el Ayuntamiento portuense aporta 25.671 euros.
En la selección de trabajadores han tenido prioridad los demandantes de empleo de larga duración mayores de 30 años, y se ha garantizado la participación de personas con discapacidad y mujeres, que suponen un 60% de las contrataciones.