Cada año mueren 120.000 personas en Alemania por el tabaco, a las que se suman 21.000 muertos por la ingesta excesiva de alcohol y otros 1.300 por el consumo de drogas ilegales, según un informe difundido hoy por el gobierno.

Aún así, en muchos ámbitos el consumo incluso decreció, según revela el informe sobre drogas y adicciones de 2018.

En lo que respecta al tabaco, la adicción que se sigue cobrando más muertos, el porcentaje de fumadores mayores de 18 años se redujo aproximadamente un 30 % desde 2003 y actualmente fuman alrededor del 21 % de mujeres y el 27 % de hombres.

El porcentaje de adolescentes fumadores cayó en los últimos diez a quince años del 21,4 % entre 2003 y 2006 al 7,2 % entre 2014 y 2017.

Las mujeres que fuman durante el embarazo también descendió, del 19,9 % entre 2003 y 2006 al 10,9 % entre 2014 y 2017.

Al mismo tiempo ganan popularidad los cigarrillos electrónicos, sobre todo entre la población de entre 16 y 29 años, con alrededor de un 20 % que ya los ha probado alguna vez, aunque el consumo regular es en términos generales considerablemente inferior.

Por otro lado la ingesta de alcohol puro per cápita ha retrocedido en los últimos cuarenta años, aunque a nivel internacional, Alemania sigue siendo uno de los países que comparativamente presenta un consumo elevado.

El 18 % de los hombres y el 14 % de las mujeres muestran en Alemania un consumo de riesgo, es decir, que beben más de 0,5 litros de cerveza al día.

Además, el consumo de alcohol genera costes económicos directos por valor de 9.150 millones de euros por enfermedad y cuidados, para rehabilitación y por accidentes, así como otros 30.150 millones de euros en costes indirectos por incapacidad laboral y subsidios de desempleo, entre otros.

La comisionada del gobierno para drogas, Marlene Mortler, subrayó que a pesar de registrarse "una evolución positiva en lo que respecta al consumo de tabaco y alcohol en niños y adolescentes", también se observa "una clara tendencia al alza en nuevos productos como cigarrillos electrónicos, pipas de agua y demás, tanto entre adolescentes como en adultos".

Por otra parte, un estudio citado en el informe estima que el número de adictos a los opiáceos asciende en Alemania 166.000, de los cuales 42.000 son mujeres y 124.000, hombres, lo que revela, además, que en los últimos veinte años, la cifra de consumidores se ha mantenido a niveles similares a pesar de la aparición de nuevas drogas en el mercado.

Dos tercios de las muertes por drogas ilegales -1.272 en 2017, lo que supone un ligero retroceso respecto a los 1.334 del años anterior- se deben al consumo de opiáceos.