La Unión Social Cristiana (CSU), el partido aliado de la canciller alemana, Angela Merkel, ha ganado las elecciones regionales del estado de Baviera con el 37,2 por ciento de los votos, según datos oficiales, pero ha perdido la mayoría absoluta en lo que ha supuesto un duro golpe para los conservadores.

Con el 17,5 por ciento de los apoyos, Los Verdes se encuentran en segunda posición seguidos por la asociación de votantes libres no afiliados Freie Wähler, una escisión de la CSU que cuenta por el momento con el 11,6 por ciento de los votos.

Tal y como se esperaba, el partido de ultraderecha Alternativa para Alemania ha conseguido representación en el Parlamento bávaro con un 10,2 por ciento de los votos. El Partido Socialdemócrata (SPD), por su parte, ha obtenido un 9,7 por ciento de los votos, lo que supone los peores resultados obtenidos por la formación en unas elecciones regionales.

Alternativa para Alemania cuenta ahora con representación en todos los parlamentos estatales menos en el de Hesse, donde probablemente lo consiga de todas maneras en las elecciones que tendrán lugar dentro de dos semanas. El Partido Liberal Demócrata (FDP, según sus siglas en inglés) también ha logrado entrar en el Parlamento con un 5,1 por ciento de los apoyos.

Según el diario local ''Die Welt'', existe una gran posibilidad de que la CSU llegue a un acuerdo con Los Verdes o Freie Wähler para formar un gobierno de coalición.

Los sondeos a pie de urna ya aventuraban que la CSU perdería la mayoría absoluta en las elecciones locales de la región del sur del país. La participación ha alcanzado el 72,4 por ciento, lo que supone casi un 10 por ciento más que en los comicios anteriores, celebrados en 2013.