La Plataforma Millán Astray ha denunciado al Ayuntamiento de Madrid ante el Tribunal de Cuentas "por la opacidad y la mala gestión económica en lo relativo a la Memoria Histórica".

En un escrito, dirigido al órgano fiscalizador, la plataforma plantea su preocupación porque no consten gastos en la materia en el Servicio de Intervención del Consistorio así como por el "desconocimiento" de en qué partidas y contables se están imputando las dietas y los gastos, así como las intervenciones como peritos de los miembros del Comisionado.

Además, denuncian que el Consistorio asegure que los gastos de nuevas placas y señalizaciones se hacen con cargo a un contrato de 2013. Consideran que esto es "imposible" porque el partido de gobierno, Ahora Madrid, no estaba entonces al frente del Ayuntamiento.

También trasladan al Tribunal de Cuentas información sobre un convenio entre Madrid Destino con el despacho de la presidenta del Comisionado de la Memoria Histórica de Madrid, Paca Sauquillo. Con él, se podría, a su parecer, incurrir en "un claro conflicto de interés" porque no es legal que ésta cobre "de forma indirecta por servicios de asesoramiento al Consistorio".

Por otro lado, han llevado también al Tribunal de Cuentas el que "cargos de confianza" de Ahora Madrid, a los que el partido obliga a donar parte de su sueldo, no publiciten dichas donaciones". Desde la Plataforma, creen que se podría estar "ante donaciones ilegales al propio partido que gobierna Madrid o a sus entramados asociativos paralelos".

Por todo ello, solicitan al órgano fiscalizador que investigue los hechos por "posible malversación de caudales públicos" por parte del Consistorio madrileño. Quieren, así, que se cuantifique "el despilfarro" del Ayuntamiento en la gestión de la Memoria Histórica y se califiquen "sus posibles anómalas prácticas económicas".

Se trata de la cuarta alta institución del Estado al que ha acudido esta Asociación de Veteranos Legionarios a denunciar "irregularidades" del Ayuntamiento de Madrid. Las tres primeras, según afirman, les han dado "contundentemente" la razón.

"Los ciudadanos de Madrid tienen todo el derecho del mundo a conocer en qué se gastan sus impuestos por Manuela Carmena y su equipo municipal, si es en políticas revanchistas de odio y de cambio de nombres de calles. Parece que encubren algo mucho más grave, profundo y anómalo tras una gestión económica que a simple vista nada entre lo errático y lo opaco", han remachado.