La Orotava cuenta, actualmente, "con uno de los rendimientos técnicos hidráulicos más eficientes de la Isla e, incluso, de Canarias", situándose en torno al 85%, por lo que solo tiene el 15 % de merma. El gobierno local destaca que, "en 1991, cuando se le adjudicó por primera vez este servicio a Canaragua", la red de abastecimiento de agua potable orotavense estaba en perfectas condiciones en un 49%.

El alcalde villero, Francisco Linares, anunció que el consistorio invierte este año "más de 300.000 euros en mejorar el servicio y adaptarlo para seguir apostando por una Villa sostenible".

En concreto, han destinado 26.000 euros al control de la calidad del agua instalando turbidímetros en línea que monitorizarán en continuo la turbidez del agua aportada al sistema. Los últimos fueron colocados en los depósitos Los Frontones, Aguamansa, Cañeño-Chasna y Las Lajas. Más de 8.000 euros destinaron a la dotación de nuevos equipos para la detección y monitorización de fugas. El edil delegado de Servicios, Felipe David Benítez, detalla que la adquisición de estos equipos se considera fundamental para implementar las estrategias de localización de fugas en la red y la consiguiente mejora del rendimiento técnico hidráulico de la instalación de suministro de agua potable, que actualmente está en casi el 85 por ciento.

Se presta especial atención al sistema de telecontrol, empleando 15.000 euros para adquirir e instalar los equipos de medida y transmisión de datos. Se han instalado puntos de control de red (PCR) en los sectores El Recodo, El Calvario y Las Cuevas, dotados de la correspondiente instrumentación y equipos de registro, y están habilitados para el envío vía radio de los datos recopilados hasta el puesto central de control permitiendo su seguimiento, monitorización y consulta en tiempo real. Se incluye en la instalación una picoturbina que aprovecha la energía hidráulica del caudal circulante, siendo así autosuficiente energéticamente, y se elimina la electricidad de la instalación.