Cuatro de los rescatados por el buque de la Guardia Costera italiana "Diciotti" fueron detenidos ayer por un posible delito de tráfico de seres humanos. La Policía detuvo a tres ciudadanos egipcios y a uno de Bangladesh, a los que se les imputan los delitos de asociación delictiva para la trata de personas, inmigración ilegal, violencia sexual e ingreso ilegal.

Los migrantes del "Diciotti" pasaron ayer su primer día en tierra después de cinco jornadas atrapados en la nave en el puerto de Catania debido a la negativa del Gobierno italiano a permitir el desembarco. Los migrantes mostraron las cicatrices resultado del maltrato sufrido en Libia. Once de ellas son mujeres de Eritrea que fueron violadas antes de embarcarse hacia Europa.

El ministro del Interior, Matteo Salvini, fue denunciado por secuestro y abuso de poder por esta medida. La investigación contra Salvini ha sido impulsada por el fiscal de Agrigento, Luigi Patronaggio, que ha viajado a Roma para interrogar a altos cargos del Ministerio del Interior.

Por este caso, Acnur se mostró ayer "aliviada" por que los 138 refugiados e inmigrantes que quedaban aún a bordo del barco de los guardacostas italianos "Diciotti" pudieran finalmente desembarcar. "Esto debe ser una llamada de atención", señaló el alto comisionado para los Refugiados, Filippo Grandi, en un comunicado.

"Los refugiados y los solicitantes de asilo ven cómo sus vidas son puestas en riesgo mientras los estados siguen enzarzados en argumentos políticos sobre soluciones a largo plazo", dijo.

El italiano sostuvo que la situación del "Diciotti" se ha resuelto finalmente, pero se preguntó "qué pasa la próxima vez" que un barco con inmigrantes rescatados pida atracar en un puerto cercano y ningún país se ofrezca durante días.

"Necesitamos un enfoque europeo colaborador y fiable hacia las personas rescatadas", enfatizó.

La Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur) reiteró su llamamiento para que se establezcan arreglos predecibles en el Mediterráneo para el desembarco de las personas que han sido rescatadas en el mar y urgió a los Estados miembros de la Unión Europea a acelerar sus esfuerzos en ese sentido.

La organización alabó a los países y organizaciones que han mostrado solidaridad y ofrecido asistencia tangible a los que permanecían a bordo" del "Diciotti". Los inmigrantes y refugiados serán acogidos por Albania, que ha aceptado recibir a una veintena; Irlanda, que también asilará a "entre 20 y 25" personas" y el resto será atendido en centros que gestiona la Iglesia Católica en Italia.