Un responsable médico del Hospital Trueta de Girona, Joaquim Bosch, ha desvelado la muerte de una enferma de cáncer tras tratarse con terapias alternativas, un hecho que ha denunciado a través de su cuenta de Twitter y cuya veracidad ha confirmado el Instituto Catalán de Oncología (ICO).

Bosch explica en las redes sociales que en una guardia en el hospital acudió una mujer joven con un cáncer de mama que presentaba fiebre y que explicó que se estaba tratando con una terapia alternativa.

Al preguntarle por el mal estado que presentaba el pecho, del que el médico publicó una foto que más tarde decidió retirar por su crudeza, la paciente respondió que su terapeuta le había dicho "que si sale (el tumor) hacia fuera es bueno, porque significa que se está oxigenando".

La mujer falleció pocos días después y Joaquim Bosch ha decidido explicar el caso para concienciar sobre los riesgos de este tipo de tratamientos.

Bosch, que se encuentra de vacaciones, utilizaba la etiqueta #StopPseudociencias en esta denuncia pública y, hoy mismo, se ha hecho eco de un tuit de la Organización Médica Colegial, en la que alerta de los peligros de abordar enfermedades en el entorno de las denominadas "pseudoterapias".

Precisamente ayer, el Consejo de Colegios de Médicos de Cataluña (CCMC) aprobó un decálogo de principios de obligado cumplimiento para los facultativos que delimita las terapias complementarias y establece que éstas nunca podrán sustituir un tratamiento médico científico.

El documento define los principios que deben seguir los médicos que indican terapias complementarias y que parten de la base de que "cualquier profesional de la medicina debe guiarse, de manera inexcusable, por criterios científicos consensuados y actualizados".

El documento recuerda que "el abordaje de cualquier enfermedad debe comprender, de manera inequívoca y fundamental, la indicación de tratamientos basados en conocimientos médicos validados" y dice que las terapias de carácter complementario, "aunque pretenden contribuir a mejorar el estado del paciente, no pueden ocupar nunca un papel principal ni exclusivo en el manejo de ninguna patología".

El decálogo complementa las normas profesionales y deontológicas ya existentes en esta materia y será de obligado cumplimiento por parte de los médicos en caso de que indiquen terapias complementarias.

"El médico tiene la obligación de insistir en la necesidad de no abandonar ningún tratamiento principal y necesario. Debe velar, además, que la aplicación de terapias complementarias no interfiera con la acción de los tratamientos principales ni pueda perjudicar al paciente", añade el documento.