El líder de la Liga Norte, Matteo Salvini, que negocia con el Movimiento Cinco Estrellas (M5S) un pacto de Gobierno para Italia, dijo hoy que será ministro en un futuro Ejecutivo para cumplir las promesas que hizo a sus electores en materia de gestión de la inmigración y fiscalidad.

"No voy a ser ministro por el gusto de serlo, voy al Gobierno solo si hay un programa firmado, con los tiempos fijados y claros", dijo Salvini en un vídeo en directo publicado en la red social Facebook.

Citó en este sentido medidas que llevaba incluidas en su programa electoral, como mayor dureza en los controles para frenar la inmigración ilegal, repatriaciones de los inmigrantes ilegales, reforma del sistema de pensiones para que los ciudadanos puedan acceder antes a la jubilación y bajadas de impuestos para todas las rentas.

Salvini afirmó que las conversaciones con el M5S están siendo "constructivas y positivas" y se están dando "pasos adelante".

Dijo que confía en que el programa político común pueda ser concluido en las próximas horas para que después las dos formaciones se concentren en pensar y acordar "los nombres" para el equipo de Gobierno y para la figura que ejercerá como primer ministro.

Además, aprovechó la ocasión para responder a las críticas de algunos sectores a estas dos formaciones, de corte euroescéptico, y advirtió a quienes les llaman "bárbaros" que "es mejor ser bárbaros que esclavos".

En opinión de este partido ultraderechista, los que les critican desde el mundo económico o político o desde los medios de comunicación "están utilizando los trucos habituales" para asustar a los italianos con frases como "sube la prima de riesgo, cae la bolsa".

Aún así, prosiguió, la Liga y el M5S "siguen adelante" porque "los jueguecitos de las finanzas" indican que están "avanzando en el camino correcto" para impulsar lo que han denominado el "Gobierno del cambio".

La Liga y el M5S negocian desde el pasado 10 de abril para intentar impulsar juntos un proyecto político para Italia.

Este lunes pidieron al jefe del Estado, Sergio Mattarella, "más tiempo" para seguir limando los desacuerdos que aún mantienen y llegar a un entendimiento tanto en las medidas políticas que quieren aprobar como en el reparto de ministerios y en la persona que será el primer ministro.

Este último escollo es importante ya que tanto Salvini como el líder del M5S, Luigi Di Maio, se presentaron ante sus electores como candidatos a este puesto en los comicios de marzo, si bien en los últimos días ambos han reconocido que están dispuestos a apoyar a una tercera persona.