El papa Francisco firmó hoy el decreto del milagro por intercesión del arzobispo de San Salvador Oscar Arnulfo Romero, asesinado en 1980 por los escuadrones de la muerte mientras decía misa, y por el que será proclamado santo, informó la oficina de prensa del Vaticano.

La beatificación de Romero se había proclamado ya con un decreto en el que se reconocía el "martirio" de Romero "in odium fidei", es decir, que fue asesinado por "odio a la fe" y por tanto sin necesidad de un milagro.

El papa se reunió ayer con el prefecto de la Congregación para la Causa de los Santos, el cardenal Angelo Amato, para aprobar algunos decretos en el que también se encontraba el del milagro para la canonización del papa Pablo VI.