"Seguimos apostando por lograr que nuestra agrupación de voluntarios siga siendo puntera en cuanto a funciones, recursos humanos y medios materiales". Así valoró ayer la concejal de Seguridad de Santa Cruz, Zaida González, los nuevos recursos con los que contará la agrupación de voluntarios de la capital: una ambulancia y un nuevo equipo contra incendios.

El vehículo operará como un recurso sanitario básico aunque, gracias a un refuerzo de su equipamiento material, podrá convertirse en una ambulancia de atención avanzada. El consistorio ha invertido casi 85.000 euros en su compra y adecuación.

La nueva ambulancia es una Mercedes-Benz Sprinter que cuenta con elementos de electromedicina; dos bombas de perfusión; un monitor desfibrilador; un respirador automático; un capnógrafo; material tanto para atender a adultos como a pacientes pediátricos; un tablero adaptable, y una camilla hidráulica de última generación para evitar vibraciones a las personas trasladadas.

Además, dispone de todos los avances para la ayuda a la conducción y la torreta de avisos prioritarios tipo LED, que está integrada en el techo del vehículo.

Cabe detallar que la agrupación de voluntarios ya dispone de otra ambulancia que ha prestado servicios a la ciudad ante emergencias y dando cobertura sanitaria en todos los eventos sociales, culturales y deportivos que se organizan en el municipio.

Esa unidad "convivirá" con la nueva dotación durante el próximo ejercicio, aunque debido a la legislación vigente deberá ser reemplazada al cumplir diez años.

"Vamos cumpliendo nuestros compromisos de renovación de los recursos de la agrupación y antes del final del mandato los voluntarios dispondrán del parque móvil adecuado, la uniformidad y demás recursos necesarios para llevar a cabo, en las mejores condiciones posibles, su impagable labor por Santa Cruz", destacó Zaida González.

La otra novedad presentada ayer es el nuevo equipo contraincendios de carácter disuasorio, que se ha instalado en una de las unidades móviles 4x4 ya existentes en la agrupación de voluntarios.

Este equipo permitirá una acción de carácter preventivo y de primera intervención ante un incendio, aunque siempre podría ser necesario complementar esa labor con el aviso a los profesionales del Consorcio de Bomberos de Tenerife.

El disuasorio cuenta con un tanque de casi 500 litros de agua, apoyado por una motobomba de alta presión, mangueras y lanzas de agua. La inversión municipal, en este caso, es de algo más de 5.000 euros.

El destino de este equipo estará vinculado, principalmente, a los lanzamientos de fuegos artificiales y otro tipo de eventos similares, con especial dedicación a la zona de Anaga.