El coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos, coordinador de Mossos d''Esquadra, Policía Nacional y Guardia Civil ante la celebración del referéndum del 1 de octubre, ha declarado hoy en el Supremo que este cuerpo policial catalán fue cómplice del Govern en la celebración de la convocatoria ilegal.

Existía una concertación entre los Mossos, el Govern y determinadas plataformas ciudadanas que hizo imposible impedir un referéndum ilegal, porque quien tenía en sus manos la posibilidad de impedirlo era quien lo convocaba, ha señalado el coronel.

La misión de los Mossos, dentro de la citada concertación, fue facilitar la votación, y con ese objetivo llegaron, según ha declarado De los Cobos, a vigilar e incluso hasta obstaculizar a las fuerzas de seguridad del Estado.

El coronel ha explicado ante el juez que su prioridad fue siempre cumplir la ley, incluso por encima de las consideraciones para mantener la convivencia ciudadana que arguyeron los responsables de Interior del Govern y de los Mossos.

Fuentes de la acusación y de las defensas han coincidido en señalar que estas han sido las afirmaciones del coronel, quien ha dado por seguro que tanto el exconseller de Interior Joaquim Forn, como el exmayor de los Mosos, Josep Lluis Trapero, que recibía órdenes del primero, estuvieron siempre dispuestos a incumplir la prohibición del referéndum dictada por el Tribunal Constitucional.

El coronel Diego Pérez de los Cobos ha comparecido como testigo ante el juez del caso abierto en el Supremo por el "procés" hacia la Declaración Unilateral de Independencia, Pablo Llarena y ha prestado durante unas cuatro horas un testimonio que todas las partes presentes en su comparecencia han considerado incriminatorio para los citados Trapero y Forn.

Así lo han explicado varias fuentes, que han recordado cómo De los Cobos tuvo siempre la impresión de que ni Forn ni Trapero tuvieron intención de cumplir el auto del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña que ordenaba la retirada de las urnas y evitar el referéndum.

Así, en una de sus reuniones para coordinar la labor policial con cargos del Govern, entre ellos Forn, celebrada pocos días antes de la celebración, De los Cobos insistió en la importancia de cumplir la ley.

Los dirigentes autonómicos defendieron entonces la necesidad de proteger la convivencia ciudadana, arguyendo que disponían no solo de la parte dispositiva del auto judicial, sino de todo el texto.

Según han explicado abogados de las defensas, De los Cobos ha reconocido el uso de pelotas de goma y gases lacrimógenos por parte de las fuerzas de seguridad del Estado, pero no la existencia de 1060 personas heridas, pues ha argüido que ese número corresponde a los atendidos, de los cuales sufrieron daños reales muchos menos.