El 27% de los médicos portugueses no sigue las normas básicas de higiene en las manos para atender a los pacientes, según alerta un informe publicado hoy en el que se recoge que siete de cada cien enfermos cogen una infección mientras están ingresados.

Los datos están recogidos en un informe sobre prevención y controles de infecciones asociadas a los cuidados sanitarios elaborado por la Dirección General de Salud (DGS) y que, en su análisis sobre 2016, concluye que "las principales infecciones asociadas a los cuidados de salud están disminuyendo".

Parte de ese descenso está relacionado con la higiene de las manos de los médicos, un aspecto que se monitoriza en Portugal desde 2009 y que es considerado como "la medida más eficaz, más simple y más económica para prevenir" las infecciones en centros sanitarios, destaca el documento.

En 2016, el 73 % de los profesionales sanitarios se lavó las manos en cinco momentos clave: antes y después de entrar en contacto con el paciente, antes de realizar un procedimiento aséptico, después de estar con riesgo de exposición a sangre y fluidos corporales y después de estar en contacto con el ambiente del paciente.

El porcentaje ha crecido gradualmente desde 2011, cuando el porcentaje era del 66,3 %, y en paralelo ha ido descendiendo la tasa de infecciones en los hospitales, que es ahora del 7,8 % y que el informe compara con el año 2012, cuando fue del 10,5 %.

En concreto, el descenso ha sido más acusado en lo referido a "neumonías asociadas a la intubación", a bacterias relativas a los catéteres intravasculares centrales (CVC) y problemas tras realizar operaciones de prótesis de rodilla o de colon y recto.