El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha devuelto a los Mossos la exclusividad en la vigilancia de su sede desde el sábado al perder vigencia las razones por las que la traspasó a la Policía Nacional tras el 1-O, al contenerse los riesgos de "alteración de la legalidad constitucional".

Así lo ha acordado hoy el presidente del TSJC, Jesús María Barrientos, en un escrito en el que ordena que la retirada de los efectivos de la Policía Nacional sea efectiva mañana, para que el próximo sábado, 2 de diciembre, la seguridad del Palacio de Justicia sea asumida de nuevo en exclusiva por los Mossos d''Esquadra.

Barrientos acordó el pasado 6 de octubre, tras la celebración del referéndum de independencia del 1-O, entregar la vigilancia de la sede del alto tribunal catalán a la Policía Nacional, para "preservar la integridad del Poder Judicial" ante una eventual declaración de independencia, que el Parlament votó el 27 de octubre, aunque quedó sin efecto tras la aplicación del artículo 155 de la Constitución.

El presidente del TSJC ha adoptado esta decisión ante "la pérdida de vigencia" de las razones que llevaron a entregar la vigilancia y custodia del Palacio de Justicia a la Policía Nacional, ya que el "nivel de contención actual de los riesgos de alteración de la legalidad constitucional y de afectación del servicio público" reclaman el "retorno a la ordinariedad".