La corporación tecnológica nipona Toshiba incurrió en un déficit neto de 49.790 millones de yenes (377 millones de euros / 437 millones de dólares) entre abril y septiembre, un 78,6 por ciento menos que el registrado un año antes, debido sobre todo a la escisión de su rama de chips.

En el citado período, primer semestre del año fiscal japonés, su beneficio operativo ascendió a 213.770 millones de yenes (1.629 millones de euros / 1.889 millones de dólares), lo que supone una cifra récord y más del doble que entre abril y septiembre de 2016, anunció hoy la empresa en un comunicado.

Su facturación por ventas también se duplicó y alcanzó los 2,386 billones de yenes (18.096 millones de euros/20.994 millones de dólares).

Este avance se debió al buen rendimiento el mercado de sus dispositivos electrónicos y de almacenamiento de datos, mientras que sus áreas de energía y de infraestructuras vieron disminuidas sus ventas, explicó Toshiba.

El factor que tuvo mayor impacto en sus resultados, no obstante, fue la escisión de su rama de chips de memoria, la más rentable de la compañía, y en particular "los costes fiscales derivados" de dicha operación.

Toshiba constituyó el pasado abril una entidad separada con su rama fabricante de memorias flash NAND, la segunda de mayor cuota de mercado global tras la surcoreana Samsung Electronics, con vistas a obtener liquidez y compensar parte de las pérdidas ocasionadas en sus operaciones nucleares en EEUU.

La junta de accionistas del grupo aprobó recientemente la venta de la nueva entidad escindida a un consorcio internacional liderado por el fondo de inversión estadounidense Bain Capital, del que también forman parte empresas como Apple o la surcoreana SK hynix.

Ambas partes prevén acordar para finales de marzo de 2018 los términos definitivos de la operación, que podría cerrarse en torno a los 2 billones de yenes (unos 15.166 millones de euros / unos 17.594 millones de dólares).

Para el ejercicio en curso, que concluirá a finales de marzo de 2018, Toshiba prevé anotarse un déficit neto de 110.000 millones de yenes (834 millones de euros /967 millones de dólares), lo que supondría la octava parte que el registrado el año anterior.

Su beneficio operativo se duplicaría hasta los 430.000 millones de yenes (3.260 millones de euros /3.782 millones de dólares), mientras que su facturación por ventas avanzaría ligeramente hasta los 4,97 billones de yenes (37.687 millones de euros /43.726 millones de dólares).

Esta estimación de resultados no incluye los previsibles ingresos por la venta de su rama de chips, con los que la empresa espera cerrar el ejercicio en positivo.