Que Anaga se mueve es un hecho incuestionable. Y que a ese movimiento contribuyen los miles de visitantes que se acercan hasta este espacio natural privilegiado, también. Por eso, la última propuesta que han formulado un total de 21 asociaciones y colectivos vecinales del macizo tiene como objeto "satisfacer" la demanda de alojamiento y pernoctación de esas personas que acuden a practicar deportes como el senderismo o disfrutar de sus bellos paisajes.

En sendos escritos dirigidos al Ayuntamiento de Santa Cruz y al Cabildo de Tenerife solicitan que los antiguos colegios unitarios de los núcleos rurales de Chamorga y Almáciga se transformen y conviertan en albergues turísticos y para visitantes, ya sea mediante gestión pública o privada.

En concreto, piden a la Corporación insular "que promueva y lleve a cabo todas aquellas gestiones y actuaciones necesarias" y "que inste al Consistorio de la capital tinerfeña a que solicite la desafección de ambos inmuebles a la Consejería de Educación y a que los ceda con posterioridad".

Los argumentos con los que las asociaciones de Anaga justifican esta demanda tienen que ver, precisamente, con la esencia de una zona que se resiste a cambiar más allá de lo imprescindible.

"La legislación que ordena nuestro territorio y, concretamente, el Parque Rural de Anaga protege un espacio único y frágil, con un alto valor natural y paisajístico". Con esta iniciativa, argumentan, "pretendemos reactivar socioeconómicamente estos dos núcleos, aumentar la oferta alojativa en la zona, crear nuevos puestos de trabajo y dar un uso a dos inmuebles que se encuentra cerrados y que cada año se van deteriorando por falta de uso".

Ambos albergues, añaden estas fuentes, "serían un complemento para el actual, Montes de Anaga, en El Bailadero, a una distancia de más de diez kilómetros de estas infraestructuras".

Chamorga es un núcleo interior en la zona de Punta de Anaga, desde donde parten y pasan los senderos más importantes transitados. Durante los fines de semana recibe una media de 200 a 300 visitantes diarios.

En cuanto a Almáciga, se trata de un núcleo rural en la costa norte del Macizo, próxima al pueblo de Taganana y el pago de Benijo, así como a las valoradas playas de esta costa. Los senderos que salen o llegan allí son numerosos y cada fin de semana la zona recibe entre 2.000 y 3.000 turistas.

"Contar con este tipo de infraestructuras en estos dos núcleos rurales supone una oportunidad para sus vecinos y los actuales o futuros negocios que se podrían generar", concluyen desde estos colectivos de Anaga.