La consellera de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias, Dolors Bassa, ha firmado hoy una resolución por la que asume personalmente todas las responsabilidades de los equipamientos titularidad de su departamento, como centros cívicos y albergues, algunos de los cuales han sido designados centros de votación.

Bassa ha optado por la misma estrategia que la consellera de Enseñanza, Clara Ponsatí, que ha firmado una resolución en la que avoca la competencia que tienen atribuidas los responsables de los equipamientos educativos en su persona para evitar responsabilidades jurídicas a los directores de los centros escolares previstos para votar el próximo domingo.

La consellera de Trabajo también ha utilizado la figura administrativa de avocación, que es una técnica de derecho administrativo empleada en la organización de la administración pública para la traslación del ejercicio de la competencia para resolver en un asunto concreto, desde un órgano jerárquicamente inferior hacia otro que sea superior.

Según ha informado un portavoz del departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias, la avocación de las responsabilidades tendrá efecto desde la recepción de la resolución hasta las 7 horas del próximo lunes, un día después de la celebración del referéndum ilegal.