La confianza de los consumidores franceses bajó en septiembre por tercer mes consecutivo, aunque se mantiene por encima de la media de largo plazo, anunció hoy el Instituto Nacional de Estadística (Insee).

El indicador de confianza cayó dos puntos en septiembre para quedarse en 101, cuando en junio había llegado a 108, lo que fue el máximo desde el segundo semestre de 2007, es decir, desde antes de la crisis.

En un comunicado, el Insee explicó que en esta última encuesta los particulares se mostraron "un poco menos optimistas sobre su situación financiera futura".

Se deterioró todavía más la percepción sobre su situación financiera pasada.

No obstante, se mantuvo prácticamente estable la proporción de los que consideran que es un momento oportuno para realizar compras importantes.