El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, será anfitrión a finales de octubre o principios de noviembre de una nueva reunión del ''grupo de Versalles'', los jefes de Estado y Gobierno de Francia, Alemania, Italia y España que quieren trabajar en propuestas para relanzar la UE tras el ''Brexit'' y avanzar en la integración.

A la reunión --que fue avanzada por el propio Rajoy en agosto-- se ha referido este viernes el director general de Coordinación de Políticas Comunes y Asuntos Generales de la UE, José Pascual Marco. Durante el debate "Relanzar la UE, un momento para actuar, un grupo avanzado de la Eurozona", organizado por la Fundación Alternativas, ha señalado que el Brexit ha sido un "acicate" para trabajar en una mayor integración entre los socios europeos y que en esa línea trabaja el ''grupo de Versalles'', que es partidario de que los países que lo deseen puedan cooperar más intensamente en determinadas políticas.

La cita de Madrid también podrá servir para preparar la Cumbre UE-África que se celebrará en Costa de Marfil en ese mes, según avanzó el propio Rajoy en la última reunión del grupo, el pasado agosto en París. Así, lo previsible es que tenga un formato similar al utilizado entonces, cuando a una parte de la reunión asistieron como invitados los líderes de Francia, Alemania, Italia, Níger, Chad y Libia, y la Alta Representante de Política Exterior de la UE, Federica Mogherini.

Los jefes de Gobierno Francia, Italia, Alemania y España se reunieron el pasado marzo en Versalles, con François Hollande como anfitrión, y volvieron a verse en agosto en el Elíseo ya con Emmanuel Macron. Desde entonces, estos cuatro países están trabajando ya en el nivel ministerial y ya tienen un método de trabajo y de intercambio de documentos, especialmente en materia de Interior, Defensa y Finanzas, han explicado fuentes diplomáticas europeas.

Durante el debate, el responsable del Ministerio de Exteriores ha explicado que, de manera similar a la idea de Macron de una "Europa que protege", España es partidaria de una UE centrada en "proteger, promover y proyectar". Entre los retos, ha destacado la necesidad de reforzar la política exterior y de defensa, la gestión de la inmigración y el asilo y la política económica.

Sin embargo, al mismo tiempo, ha advertido de que no se puede "ir más allá de los deseos de los ciudadanos". Entre otras cosas, se ha referido a las políticas de inmigración. Europa, ha dicho, es un continente abierto y solidario pero hay una "tensión entre generosidad y realismo", y ese realismo "lo ponen los ciudadanos". Así, ha dicho que "una Europa de fronteras abiertas y descontroladas se acabaría electoralmente en pocos años", porque hay "tensiones" proteccionistas y populistas en muchos países, entre ellos Francia y Alemania.

Por su parte, el vicepresidente de la Fundación Alternativas, Nicolás Sartorius, ha advertido de que no será posible una unión económica sin unión política, porque una política económica a cargo de un "fondo" o cualquier otra entidad sin control político sería "un escándalo democrático".