La Comisión Europea (CE) ha abierto un procedimiento de infracción a Polonia al enviar al Gobierno una carta de notificación formal, tras publicarse este viernes en el boletín oficial de ese país la reforma que modifica el funcionamiento de los tribunales regionales y de apelación.

El Ejecutivo comunitario precisó hoy en un comunicado que las autoridades polacas disponen de un mes para responder.

Si Varsovia no contesta en ese plazo o Bruselas considera insatisfactoria la respuesta, la Comisión publicará un dictamen motivado, la segunda etapa en el procedimiento de infracción.

En la carta de notificación, el Ejecutivo comunitario asegura que al otorgar al ministro de Justicia el "poder discrecional" de prorrogar el mandato de los jueces que han alcanzado la edad de jubilación, así como de destituir y nombrar a los presidentes de los tribunales, la independencia de las cortes polacas "se vería socavada" con la nueva ley.

Bruselas añade que la reforma permite al ministro de Justicia ejercer su influencia sobre los jueces, en particular, mediante "los vagos criterios para prolongar sus mandatos, socavando así el principio de inamovilidad de los jueces".

La CE afirma que al disminuir la edad de jubilación, la ley permite al ministro extender el mandato de los magistrados hasta diez años en el caso de las mujeres y hasta cinco en el de los hombres.

Bruselas también considera que la reforma discrimina a las mujeres al establecer edades de jubilación diferentes para juezas (60 años) y jueces (65 años).

Además, la legislación no establece un plazo temporal para que el ministro de Justicia adopte una decisión sobre la prolongación de los mandatos, de modo que, en opinión de la Comisión, se le permite "conservar influencia sobre los jueces afectados para el resto de su mandato judicial".

Más allá de iniciar el procedimiento de infracción, el vicepresidente primero del Ejecutivo comunitario, Frans Timmermans, envió este viernes una carta al ministro polaco de Asuntos Exteriores, Witold Waszczykowski, en la que invita tanto a él como al titular de Justicia, Zbigniew Ziobro, a una reunión en Bruselas "en la mayor brevedad posible" con el objetivo de "relanzar el diálogo".

El presidente polaco, Andrzej Duda, ratificó el pasado martes la ley que reforma el funcionamiento de los tribunales regionales y de apelación y permite al ministro de Justicia, quien también es fiscal general, el nombramiento de magistrados, una norma que, según la oposición, reduce la independencia judicial.

El texto ratificado es parte del paquete de tres normas que integran la controvertida reforma judicial impulsada por el Gobierno del partido nacionalista Ley y Justicia.

Tras días de protestas, el presidente polaco anunció el lunes que no ratificaría el polémico proyecto de ley del Tribunal Supremo ni el de reforma del máximo órgano de gobierno de los jueces.

El miércoles, la Comisión Europea (CE) dio a Polonia un mes para rectificar las reformas de su sistema judicial y cambiar las leyes que a juicio de Bruselas ponen en riesgo el Estado de derecho, y reiteró su disposición a activar el artículo 7 que puede desembocar en sanciones si no se abordan estas preocupaciones.

El Ejecutivo comunitario basó esa recomendación sobre el Estado de derecho en las dos publicadas en 2016 y agregó "nuevas preocupaciones", pues Polonia "no ha abordado los problemas identificados" y ha dado "pasos adicionales" que agravan el asunto.