La capa de hielo de Groenlandia se ve a menudo como un ambiente prístino, pero una nueva investigación ha revelado puede no ser así. Un estudio liderado por Dinamarca, publicado en la revista ''Environmental Research Letters'', examinó cómo los microbios de la capa de hielo tienen el potencial de resistir y degradar los contaminantes emitidos a nivel mundial como mercurio, plomo, bifenilos policlorados (PCB, por sus siglas en inglés) e hidrocarburos aromáticos policíclicos (PAH, por sus siglas en inglés).

La doctora Aviaja Hauptmann, de la Universidad de Groenlandia y directora de la investigación, apunta: "Los contaminantes emitidos a nivel mundial se acumulan en el Ártico y se almacenan en los ambientes congelados de la criosfera, lo que significa esencialmente que se han convertido en reservorios de productos químicos tóxicos. Entender cómo interactúan los procesos biológicos con la contaminación en el Ártico es limitado, por lo que esperamos que nuestro estudio represente un gran paso adelante en la comprensión y resolución de este problema".

Los investigadores tomaron muestras de múltiples ubicaciones de hielo superficial en la capa de hielo de Groenlandia y descubrieron que las comunidades microbianas encontradas en las capas de hielo tienen el potencial de resistir y degradar los contaminantes.

"Vimos que el potencial microbiano para degradar los contaminantes antropogénicos, incluidos los bifenilos policlorados (PCB), los hidrocarburos aromáticos policíclicos (PAH) y los metales pesados ??de mercurio y plomo, estaba extendido y no se limitaba a las regiones cercanas a las actividades humanas", subraya la doctora Hauptmann.

Dado que el potencial genético de la resistencia a los contaminantes y la degradación suele indicar la presencia de los contaminantes pertinentes, sus resultados indican que, desde el punto de vista microbiológico, la capa de hielo de Groenlandia no es un entorno prístino.

"Hay que prestar más atención a la posible liberación de contaminantes antropogénicos en este entorno que cambia rápidamente. Como las capas de hielo se derriten debido al cambio climático, tienen el potencial no sólo de aumentar el nivel del mar, sino también la polución del ambiente a su alrededor a través de la liberación de otros contaminantes antropogénicos que se han acumulado en ellos", concluye Hauptmann.