El ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal, ha acusado hoy a Enel de hacer política "a favor de los ciudadanos italianos a costa del consumidor español y de los trabajadores españoles" por el posible cierre de las centrales de carbón de Andorra (Teruel) y Compostilla (León).

Durante la sesión de control en el pleno del Senado, Nadal ha culpado al último Gobierno del PSOE (2004-2011) del posible cierre de esas centrales por haber facilitado la compra de Endesa, su propietario, por parte de Enel.

"No busque responsabilidades donde no las hay. No fue el PP el que trajo a España como propietaria de la principal eléctrica española (Endesa) a una empresa pública italiana", ha recalcado Nadal a preguntas del senador socialista Graciliano Palomo.

Endesa sostiene que acometer las inversiones en materia medioambiental que requerirían las centrales de Andorra y Compostilla para seguir en funcionamiento después de 2020 las haría inviables en las condiciones regulatorias actuales, por lo que de momento no se plantea abordarlas.

A Enel "no le importa, para hacer política de empleo en Italia, generar desempleo en España; no le importa, para hacer política medioambiental en Italia, hacer política de pérdida de competitividad en España", ha señalado Nadal.

El ministro ha reiterado que fue el Gobierno socialista el que dio entrada a Enel en Endesa "a pesar de las advertencias del PP", que pensaba que "no era una buena idea" traer a una empresa "cuyo propietario y gestor era el Estado italiano".

Nadal ha criticado al PSOE porque, según ha explicado, le planteó elaborar un decreto ley que estableciera condiciones para el eventual cierre de centrales eléctricas, y el Grupo Socialista "primero dijo que lo tenían que pensar y luego que no lo veía".

Según el ministro de Energía, el Grupo Socialista tampoco respondió a la pregunta de si respaldaba que las centrales de carbón autóctono formaran parte del mix de generación en España.

"El Gobierno y el PP somos los únicos que hemos dicho que queremos que el carbón forme parte del mix de 2020 a 2030", ha indicado.

Previamente, el senador Palomo había pedido al Gobierno que tome las medidas necesarias para que las empresas puedan abordar las inversiones necesarias en materia de medio ambiente para mantener abiertas las centrales de carbón más allá de 2020, cuando entre en vigor la nueva directiva europea de emisiones.

"Al Gobierno le corresponde tomar una decisión estratégica, no dejarlo en manos del mercado, y tomar las medidas necesarias para que las centrales puedan invertir y cumplir la normativa europea", ha señalado.