El Banco de España ha asegurado que el sector financiero realizó 1.900 millones de euros en provisiones adicionales para hacer frente a la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) sobre las cláusulas suelo.

Así lo ha puesto de manifiesto el Banco de España en su Informe de Estabilidad Financiera de mayo, publicado hoy, en el que ha recordado que las diversas sentencias sobre las cláusulas suelo provocaron que las entidades dejaran de aplicarlas, o constituyeran provisiones para cubrir las contingencias que pudieran producirse.

En particular, la sentencia del TJUE, en la que se dicta a favor de la retroactividad de las cláusulas suelo abusivas, ha obligado a las entidades a realizar provisiones adicionales de unos 1.900 millones en la cuenta de resultados de 2016, según el organismo.

En este sentido, ha advertido de que el citado importe, "es una manifestación del impacto que tiene el riesgo legal" en la rentabilidad de la banca, y, por tanto, "en la necesidad de su adecuado control, gestión y cobertura".

En el citado informe publicado hoy, el Banco de España también hace referencia a los activos dudosos del sistema financiero, que a nivel consolidado, disminuyeron un 10,3 % en 2016, y continuaron la senda decreciente iniciada en 2014.

Igualmente, el peso relativo de los dudosos sobre los activos totales cayó al 4,1 % en 2016.

El Banco de España también ha precisado que la mayor concentración de crédito dudoso se alcanzó en el sector empresarial (69 %) y, dentro de él, una mayor proporción correspondió a los dudosos del crédito destinado a construcción y actividades inmobiliarias (37 %).

De la misma manera, el crédito dudoso a hogares alcanzó el 29 % en 2016 y, la mayor parte, correspondió a la financiación para adquisición de vivienda (21 %).

El Banco de España también ha explicado que la entrada de activos dudosos en 2016 continuó descendiendo, aunque su reducción fue menor.

No obstante, las ventas de activos adjudicados superaron los 12.000 millones, según el Banco de España, que ha precisado que como resultado del descenso de los activos dudosos y los adjudicados, el volumen total de activos improductivos se situó en los 190.000 millones, el 9 % menos.

Pese a esta reducción, estos activos "siguen constituyendo una proporción relevante del balance de las entidades en su actividad en España, presionando a la baja la rentabilidad del sector", ha advertido el Banco de España.

Por otro lado, el organismo también ha destacado que la banca española ha seguido haciendo "un uso importante" de la liquidez proporcionada por el Banco Central Europeo (BCE), y que desde 2016, y hasta finales de abril de 2017, la apelación bruta ha aumentado un 33,3 %.

De esta manera, la cuota de adjudicación de fondos a entidades residentes en España en las subastas de liquidez alcanzó en marzo de 2017, en un valor medio del 24,6 %.

De vuelta a los datos de 2016, el Banco de España ha indicado que los depósitos minoristas captados por la banca crecieron un 3,1 %, en tanto que sobre el crédito, ha destacado el tremendo recorte, de casi el 60 %, que ha experimentado la financiación destinada a construcción e inmobiliaria desde finales de 2011, que en términos absolutos ha sido de unos 220.000 millones.

Por último, el informe asegura que el crédito nuevo ha iniciado su recuperación, que aún no reflejan los volúmenes en "stock".