La televisión estatal argelina difundió hoy y por segunda vez en apenas diez días nuevas imágenes del presidente de Argelia, Abdelaziz Buteflika, cuyo estado real de salud es objeto de especulaciones desde hace varios años.

En esta ocasión, el telediario oficial de las 19.00 horas mostró al mandatario recibiendo a su homólogo congolés, Denis Sasu N''Gueso, sentado en una silla y como en vídeos precedentes tampoco pronunció palabra alguna.

Tras la audiencia, a la que también asistió el primer ministro argelino, Abdelmalek Sellal, el propio N''Gueso explicó que ambos mandatarios abordaron la actualidad árabe y africana, con especial atención al conflicto en Libia.

Esta es la segunda vez que la televisión estatal ofrece imágenes de Buteflika desde que a finales de febrero la cancelación el mismo día de la visita que la canciller alemana Angela Merkel disparara las especulaciones sobre su verdadera salud.

En un comunicado conjunto, ambos gobiernos aseguraron entonces que la razón había sido "una indisposición transitoria" del mandatario, que padecía de "bronquitis aguda", y afirmaron que el viaje se retomaría en el futuro, aunque sin precisar fecha.

En las imágenes divulgadas el pasado 19 de marzo por el mismo noticiero se observaba como el mandatario recibía sentado en una silla al ministro argelino de Asuntos Magrebíes, la Unión Africana y la Liga Árabe, Abdelkader Mesahel.

Buteflika, el dirigente argelino que más tiempo lleva en el poder, cumplió 80 años el pasado 2 de marzo envuelto en una incertidumbre cada vez mayor sobre su verdadero estado de salud, su capacidad real para dirigir el país y su futura sucesión.

El mandatario sufrió un derrame cerebral en 2013 que ha mermado su capacidad física y convertido su salud en un enigma que se debate entre susurros en cualquier rincón.

Desde entonces, apenas ha dado discurso publico alguno -ni siquiera durante la campaña electoral de 2014 en la que fue reelegido para un cuarto mandato- y aparece escasamente en actos oficiales y protocolarios.

Cuando lo hace, siempre es en silla de ruedas, a través de imágenes que proporcionan la televisión estatal y otros medios oficiales, los únicos que son invitados y tienen acceso a actos de la presidencia.