La mayoría de Junts pel Sí en la Mesa del Parlament ha admitido hoy a trámite definitivamente la propuesta de reforma del reglamento de la cámara catalana, que permitiría agilizar de forma exprés la aprobación de las leyes de desconexión.

Mientras tanto, el vicepresidente del Govern, Oriol Junqueras, lidera los contactos con la CUP para intentar consensuar una respuesta al último dictamen del Consejo de Garantías Estatutarias y evitar así una nueva crisis por el proyecto de presupuestos de la Generalitat para 2017.

En la Mesa del Parlament no han prosperado las peticiones de Ciudadanos, PSC y PPC para que se reconsiderara la decisión, tomada la semana pasada, de admitir a trámite de forma condicionada la propuesta de reforma de JxSí, para permitir que la mayoría independentista en el Parlament pueda aprobar las leyes de desconexión con el procedimiento de lectura única.

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha acusado a la Generalitat de "vivir en una realidad paralela que nada tiene que ver con los deseos de los catalanes" y de enfrascarse en una "huida hacia adelante" sin apoyo social y sin respetar siquiera sus instituciones de autogobierno.

El portavoz adjunto de Ciudadanos en el Parlament, Fernando de Páramo, ha explicado que su grupo valora presentar un recurso de amparo ante el Tribunal Supremo por la intención de JxSí de "construir un reglamento a su medida para declarar la independencia".

El PSC ha avanzado que no participará en una futura ponencia conjunta para reformar el reglamento del Parlament y ha dejado claro que estudiará "todos los recursos" posibles para "garantizar los derechos de los diputados".

El coordinador general del PPC, Xavier García Albiol, ha señalado que si finalmente la propuesta de reforma del reglamento sigue adelante los populares solicitarán, con toda probabilidad, un recurso de amparo ante el TC.

Catalunya Sí Que Es Pot ha registrado una enmienda a los Presupuestos para que el Govern garantice una dotación económica "suficiente" para celebrar un referéndum con garantías y reconocimiento internacional.

Paralelamente, en la reunión de hoy del Govern, según fuentes de la Generalitat, no se ha decidido cómo debe quedar la disposición adicional de los presupuestos que alude al referéndum y que, según el Consejo de Garantías Estatutarias, es inconstitucional, pero sí se ha encargado a Oriol Junqueras que lidere los contactos con la CUP y con Catalunya Sí Que Es Pot para abordar los posibles cambios.

Las negociaciones entre Govern y la CUP son inminentes, si bien en la concreción de la solución también intervendrán representantes del grupo parlamentario de Junts pel Sí (JxSí), han indicado diversas fuentes conocedoras de los contactos.

En JxSí no descartan introducir algún tipo de modificación en la disposición cuestionada, pero la CUP ya ha advertido de que si la referencia al referéndum desaparece de los presupuestos se desdirá de su prometido apoyo al proyecto del Govern.

El diputado de la CUP Albert Botran ha afirmado que no se "imagina" que JxSí quiera cambiar la disposición adicional, y más cuando "es previsible" que el Tribunal Constitucional (TC) "la suspenderá igualmente".

Pese a estas advertencias, fuentes de la Generalitat observan con "optimismo" la negociación y confían en que se alcance un acuerdo.

No obstante, la discusión puede ahondarse cuando el Consejo de Garantías Estatutarias emita -posiblemente este viernes, según fuentes soberanistas- su dictamen sobre la ley de acompañamiento de los presupuestos, que incluyen numerosas medidas acordadas entre el Govern y la CUP.

La consellera de la Presidencia, Neus Munté, ha recalcado que el referéndum es "irrenunciable" y ha dicho que "instrumentos" como los presupuestos que sirven para llegar al "compromiso nítido, claro y explícito del referéndum" no tienen por qué "correr ningún peligro".

También ha sido protagonista hoy el presidente de la patronal catalana Foment del Treball, Joaquim Gay de Montellà, al considerado que la solución para Cataluña pasa por un nuevo Estatut que debería ser votado por los ciudadanos en un referendo.