El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha ratificado hoy su disposición al diálogo con Cataluña pero para hablar solamente de los problemas reales de los ciudadanos de esa comunidad, no para celebrar un referéndum, para "liquidar la soberanía nacional" o para incumplir la ley.

Rajoy ha reiterado ese planteamiento en la conferencia de prensa que ha ofrecido junto al presidente francés, François Hollande, al término de la XXV cumbre bilateral, celebrada en Málaga, y al ser preguntado por las informaciones en las que se apunta la posibilidad de una nueva vía de diálogo entre el Gobierno central y el de la Generalitat.

El jefe del Ejecutivo ha recalcado el mensaje que viene lanzando ante la apuesta soberanista en Cataluña, consistente en que sigue teniendo la mano tendida para hablar con el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont.

Pero ha aclarado que su intención es abordar "los problemas reales de los ciudadanos", como pueden ser, ha citado como ejemplo, las infraestructuras o la dependencia.