El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, ha dado los primeros pasos para sacar adelante su propuesta de redefinir ideológicamente el partido, que apuesta por pasar página a su origen "socialdemócrata" y resituarlo en el "centro liberal progresista".

Y ha sido así después de que hayan sido rechazadas las dos enmiendas a la totalidad a la ponencia de Valores que querían mantener el ideario socialdemócrata, aunque todavía quedan por debatir tres enmiendas parciales que también defienden que Ciudadanos no pierda su definición original.

Rivera, que ha participado en el debate de esta ponencia, ha dicho en una conversación con periodistas que no se puede enmendar completamente el ideario porque sería cambiar del todo el argumentario, pero está dispuesto a introducir algún que otro retoque, aunque no ha querido concretarlo.

Según lo está viendo el líder de Cs, los debates están siendo menos discrepantes y se ha mostrado muy satisfecho por cómo está transcurriendo esta cuarta Asamblea.

Para los perdedores de esta discusión ideológica, el sector Mejor Unidos, que defendía una de estas enmiendas a la totalidad, ha sido un debate "intenso" y de política "de buen nivel" como han asegurado a Efe fuentes de esta corriente catalana.

Han utilizado la palabra "fraternidad" para describir el espíritu que está reinando en la mesa de trabajo hasta el punto que Rivera ha reconocido que se ha dado un abrazo con el exdiputado autonómico Jordi Cañas, uno de los defensores de mantener el ideario socialdemócrata.

Pero no solo se han rechazado las dos enmiendas a la totalidad presentadas a la ponencia de Valores, sino también todas las demás: otras tres a la propuesta de Estatutos y dos a la de Estrategia y todas ellas por más del 92 por ciento de los delegados que participaban en las tres mesas de trabajo.

Después de una pausa para almorzar, las mesas han vuelto a reunirse para seguir trabajando y se espera que puedan terminar a media tarde.