Las mujeres españolas que hacen una vida sedentaria tienen un 71% más de riesgo de desarrollar cáncer de mama que aquellas otras que cumplen las recomendaciones internacionales sobre ejercicio físico.

Las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para la población adulta en general son las de realizar a la semana 150 minutos de ejercicio físico moderado en periodos mínimos de diez minutos (andar a buen paso) o 75 minutos de ejercicio intenso.

En esta línea, seguir una adecuada actividad física tiene un efecto preventivo sobre la aparición de este tumor en mujeres pre y postmenopáusicas y en todos los subtipos moleculares.