El área de Drogodependencias del Ayuntamiento de La Orotava hizo ayer balance de su trabajo en el último año y destacó que más de mil alumnos han participado en ese periodo en los talleres de prevención de adicciones que se imparten en los ocho centros de secundaria y, en los casos en los que se solicitan, en los últimos cursos de Primaria. El alcalde villero, Francisco Linares (CC), apostó por ahondar en las labores de prevención "en un municipio con 12.000 jóvenes", continuar con la amplia la oferta de actividades saludables en horario de tarde y no descuidar la vigilancia para evitar el tráfico de drogas: "Hay que acabar con los sinvergüenzas y golfos que ofrecen drogas a nuestros jóvenes".

La edil del área, María Eugenia Mesa (CC), recordó que el III Plan de Drogodependencias de La Orotava está en vigor hasta 2017 y que continuará ofreciendo ocio alternativo, formación y asesoramiento a los jóvenes y a sus familias para que las drogas no se conviertan en un problema.

El técnico de Drogodependencias, David Peña, explicó que las drogas legales (alcohol y tabaco) siguen siendo las que más problemas causan en la Villa. Los derivados del cannabis son la sustancia ilegal que más se consume y, en los últimos años, se aprecia un descenso en los casos de la cocaína y la heroína. Otros retos de futuro son continuar retrasando la edad de inicio en el consumo y evitar el mal uso de la medicación.

A juicio de Linares, "se ha avanzado muchísimo en los últimos años y tenemos un pueblo bastante sano, pero mientras haya un sólo joven con problemas con las drogas, no vamos a parar". El alcalde recordó que "en La Orotava funcionan 17 escuelas municipales; hay 59 clubes deportivos en funcionamiento, y cada tarde hay 25 instalaciones deportivas abiertas. Ese es el mejor antídoto contra las drogas: mantener a nuestros niños y jóvenes ocupados".