Toda la población de la ciudad canadiense de Fort McMurray, en el noroeste del país, alrededor de 70.000 personas, ha recibido la orden de evacuar la población ante el temor que un incendio forestal consuma toda la comunidad.

Las autoridades municipales ordenaron la evacuación obligatoria a las 18.20 hora local del martes (las 0.20 GMT del miércoles) y solicitaron a los habitantes de la ciudad que se dirijan hacia el norte para evitar las llamas que bloquean la única autopista que conecta Fort McMurray con el sur de la provincia de Alberta.

"Sean pacientes, conduzcan con cuidado y por favor, cedan el paso a los vehículos de emergencia", explicaron las autoridades municipales.

La orden de evacuación total se produjo ante el "rápido crecimiento del incendio" en el norte, que es en la actualidad la única ruta de escape de la ciudad.

Por su parte, las autoridades de la provincia de Alberta informaron que han evacuado a más de 100 pacientes que se encontraban en el hospital Northern Lights Regional Health Centre.

Una de las principales preocupaciones de las autoridades ahora es el alojamiento de las decenas de miles de personas que están escapando del incendio.

Comunidades aledañas a Fort McMurray así como las principales empresas que operan en la región, uno de los principales centros petrolíferos de Canadá, han abierto centros para recibir a miles de personas.

La comunidad de Lac La Biche dijo que está esperando la llegada de entre 500 y 1.000 vehículos con evacuados de Fort McMurray.

Imágenes transmitidas por las televisiones locales muestran gigantescas llamas en los bosques que rodean la ciudad alimentadas por las inusuales altas temperaturas de la región y fuertes vientos que han empujado el incendio que se inició el domingo hacia el centro de la ciudad.

Aunque las llamas no han causado víctimas, varios hogares y una comunidad de viviendas móviles han sido consumidas por las llamas.

Las imágenes también muestran largas colas de vehículos colapsando las rutas de escape de la ciudad.

Las autoridades canadienses están solicitando a los habitantes de Fort McMurray que procedan a evacuar la ciudad con calma y siguiendo las instrucciones.

El ministro de Seguridad Pública de Canadá, Ralph Goodale, dijo en un comunicado que "recomiendo a los residentes de Fort McMurray afectados que sigan las instrucción de sus agentes de la autoridad locales. Si se ha ordenado su evacuación, por favor, hágalo por su propia seguridad".

Por su parte, la primera ministra de la provincia de Alberta, Rachel Notley, declaró durante una rueda de prensa a las 23.00 GMT del martes que están "concentrados totalmente en asegurar la seguridad de la población y sacarlos de la ciudad".

El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, explicó en su cuenta de la red social Twitter que había hablado con Notley para "ofrecer el apoyo de nuestro Gobierno a la gente de Fort McMurray. Estamos listos para ayudar".