La Audiencia Nacional juzga hoy a un hombre que por vender paquetes de viaje a 255 personas para asistir a la final España-Holanda del Mundial de Fútbol de Sudáfrica de 2010 con entradas falsas, por lo que se enfrenta a una petición fiscal de 8 años de cárcel.

El acusado es Pablo Casanova Freire, que ya ha sido condenado en Lugo a 1 año de cárcel por apropiación indebida y era en 2010 administrador de la agencia de viajes Yuturna Asociados, con domicilio en Las Rozas (Madrid).

Casanova, según el escrito de acusación del fiscal, ideó sacar a la venta a través de su agencia unos paquetes en los que ofrecía el viaje a Johannesburgo y la entrada para el partido por un total de 2.450 euros por persona, que incluía los vuelos de ida y vuelta desde Madrid y los traslados al estadio.

Sin embargo, no disponía de dinero para comprar las entradas ni fletar el avión, por lo que se limitó a adquirir 46 entradas falsas y a contratar un vuelo chárter acreditando el pago con un recibo de transferencia también falso.

Para fletar el avión, el acusado contactó con Worldwide Charters Internacional, empresa dedicada al alquiler de vuelos chárter, y concertó con ella un contrato para fletar un avión por 575.400 euros que llevara a los clientes a Sudáfrica.

La empresa le pidió que pagara por adelantado y Casanova simuló entonces dos transferencias por la cantidad total, alterando la página web del banco para engañar al proveedor de aviones.

De esta manera, donde figuraba "Emitir transferencia internacional" escribió "Transferencia internacional confirmada" y puso a continuación "fecha de valor 12/7/2012" para justificar que el dinero no llegaría hasta ese día, el siguiente a la celebración de la final de fútbol.

La empresa de chárter creyó sus explicaciones y consiguió un avión de la compañía Pullmantur que estaba en el aeropuerto de Madrid, a la que prometió pagar el 12 de julio, aunque el combustible lo compró WW Charters.

Finalmente, Pullmantur fletó el avión a Sudáfrica con 255 pasajeros, pero Casanova nunca pagó ni el flete (349.708 euros) ni el combustible.

Esas 255 personas, algunas clientes directos de la agencia del acusado y otras de terceras agencias que habían subcontratado sus servicios, se trasladaron el 10 de julio a Sudáfrica y de allí a las inmediaciones del estadio, pero solo les entregaron las 46 entradas falsas dándoles varias explicaciones del por qué no tenían más.

Cuando intentaron acceder con esas entradas, se les rechazaron, por lo que la mayoría de los españoles (salvo algunos que consiguieron allí entradas por otras vías o se colaron en el estadio) no presenciaron el partido.

Por estos hechos, el fiscal pide para Casanova una pena de 8 años y medio de cárcel, además del pago de indemnizaciones por 367.000 euros a las personas afectadas (tanto en concepto de devolución del dinero que se gastaron como de daños morales).

Asimismo, Pullmantur le reclama 349.708 euros por el flete del avión y WW Charters el dinero que le costó el combustible, que no se detalla en el escrito de acusación. El juicio se celebrará en la sede de la Audiencia Nacional de la calle Génova.