Los españoles miran por la integridad de sus familiares. Así lo certifica las cifras que llegan sobre seguros de vida desde el año 2015, en el cual se conoció que más de 21 millones de españoles tienen contratado un seguro de vida. Sin duda un gran dato que hace indicar que este tipo de seguros está más vivo que nunca en España. En el estudio además, se habla de qué factores pueden influir a los españoles a la hora de contratarlos.

Estos factores varían según para qué se contrate un seguro de vida, ya que la contratación del mismo puede estar ocasionada por temas como la de convenir un préstamo, hipoteca, o para enfrentar los gastos que se puedan tener en un futuro por temas como la educación de hijos o para asegurar el bienestar de la familia en general. En el caso de tener hipoteca, es aconsejable contratar uno de los seguros de vida hipoteca, caracterizados por ser seguros de capital decreciente, es decir, que se ajustan al capital que vamos debiendo al banco. Webs como puntoseguro.com pueden ser mucha utilidad.

El capital o cantidad que debemos asegurar en este tipo de seguros también debe basarse en cuales son los ingresos de la persona que lo contrata y mirar cual es la suma de todo el dinero que entra anualmente en nuestras casas en forma de pensión, salario, viudedad o cualquier otro tipo de ingreso.

Además de esto, al contratar un seguro de vida hay que tener en cuenta detalles como la situación de empleo en la actualidad, si puede haber cambio de empleo y si los ingresos pueden incrementarse o restar. Es de importancia también contar con las personas que están a nuestro cargo (hijos o padres) y el gasto que pudiera haber por parte de ellos en el futuro.

El precio del seguro de vida variará en función de nuestro estado de salud en el que nos encontremos en la actualidad, que tipo de profesión desempeñamos (a mayor riesgo, mayor prima), y si practicamos deportes de riesgo.

Por último, es importante conocer lo que no cubre el seguro de vida, como pueden ser hipotéticas situaciones en la que el mismo asegurado haya tenido el siniestro por causas tales como haber tomado alcohol o estupefacientes o por haber practicado algún deporte de riesgo extremo que no hubiese declarado en el momento de la contratación del seguro.