El Parlamento griego aprobó hoy un nuevo paquete de medidas acordado con los acreedores, que incluye una polémica ley sobre ejecuciones hipotecarias, a cambio de un nuevo desembolso del rescate y de fondos para la recapitalización de la banca.

La votación, que salió adelante únicamente con los votos de los diputados de la coalición de Gobierno, contó con el rechazo de todos los partidos de la oposición y evidenció de nuevo las diferencias en el Ejecutivo.