Las cotorras argentinas ("myiopsitta monachus") están consideradas una de las especies de aves más invasoras de todo el planeta. Cientos de miles de ellas se han importado para el comercio de mascotas en las últimas décadas y sus poblaciones salvajes comenzaron a aparecer como especie invasora en los EE UU en la década de los 60 y en Europa en los 80.

Sin embargo, estas dos poblaciones independientes parecen tener su origen en la misma área de distribución natural, probablemente ubicada entre el sur de Brasil (Río Grande do Sul), Entre Ríos (Argentina) y Uruguay, según un estudio, publicado en la revista Molecular Ecology y recogido por Sinc, en el que participan la Estación Biológica de Doñana (EBD-CSIC), la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla (UPO) y el Museo de Ciencias Naturales de Barcelona.

Las especies exóticas invasoras son un componente fundamental del cambio global y una de las causas principales de extinción de especies nativas. Por ello, se ha estudiado desde distintas perspectivas cuáles son las variables que determinan el éxito de establecimiento de dichas especies.