La extinción de un incendio en un solar ubicado en la calle Ponce de León, del popular barrio de Las Delicias, en Ofra, puso al descubierto en la madrugada de ayer los cuerpos sin vida de dos personas, un hombre y una mujer, que vivían en una infravivienda que se hallaba en su interior, en la trasera de un conocida pizzería de la Carretera General del Sur, frente al Campo de Fútbol de Las Delicias.

Sobre las 03:20 horas, un aviso a la Policía Local de Santa Cruz y a los bomberos alertaba de un incendio en el solar de la calle sin salida, por lo que se activó el protocolo de actuación para este tipo de situaciones.

Una vez allí, cuentan los propios vecinos consultados, los bomberos tuvieron que tirar abajo parte del muro perimetral del espacio para poder acceder al cuarto y apagar las llamas, que se produjeron en unos colchones. La sorpresa fue mayúscula cuando los efectivos del Consorcio avisaron a la Policía Local por advertir la presencia de dos cuerpos.

Se trata de un hombre y una mujer que, según los vecinos de la zona, vivían en la infravivienda desde hacía un tiempo, que se dedicaban a la indigencia y tenían problemas con las drogas. Para acceder al solar saltaban el muro de aproximadamente 1,70 metros de altura.

En este sentido, las propias fuentes apuntaron que la chica, de unos 30 años de edad, se encontraba embarazada, como así se lo hizo saber a algunas personas del barrio.

En cambio, el varón de unos 40 años de edad, tal y como apuntaron la Policía Local y los propios vecinos, solía pasar el día a las puertas de un conocido supermercado y era bastante conocido porque utilizaba una muleta por estar impedido de su pierna derecha. En el establecimiento se ponía a pedir dinero como método de subsistencia.

Según confirmó otro de los consultados, al parecer la pareja fallecida era toxicómana y las discusiones entre ellos eran muy habituales. Precisamente, sobre las 02:00 horas, los fallecidos despertaron a varios de los vecinos colindantes por los gritos, algo que tampoco los sorprendió. No obstante, aseguraron que a pesar de que las riñas entre ellos eran corrientes, siempre se comportaron con educación y buenos modales con las personas del barrio.

"Era algo que tenía que pasar. Antes de esta pareja el solar era visitado por todo tipo de personas. Siempre ha sido un punto de encuentro para la drogadicción o simplemente para ocupas que utilizaban cuartos de la vivienda para dormir y hacer su vida allí. Esto es una gran desgracia y a ver si de una vez por todas el Ayuntamiento de Santa Cruz pone fin al problema y obliga al propietario del terreno a limpiarlo y hacer los muros mucho más altos. Las ordenanzas municipales lo pueden obligar", algo que ya ha sido demandado en reiteradas ocasiones, apuntó un señor, vecino de la misma calle.

Lo cierto es que tras descubrirse los cuerpos, los agentes locales levantaron acta del suceso y se pusieron en contacto con la Policía Científica del Cuerpo Nacional de Policía para que se activara el protocolo de supervisión por parte de la autoridad judicial.