Nuevos mapas de la Vía Láctea, elaborados por un equipo internacional de científicos, puede ser la respuesta a las preguntas sobre el polvo de estrellas que llevan desconcertando a los científicos desde hace un siglo. Los investigadores dicen que su trabajo, publicado en ''Science'', demuestra una nueva forma de descubrir la ubicación y el tiempo de composición del medio interestelar, el material que se encuentra entre las estrellas de una galaxia.

Este material incluye polvo y gas compuesto por átomos y moléculas que se quedan atrás cuando una estrella muere. El material también suministra los bloques de construcción para nuevas estrellas y planetas.

"Hay un viejo refrán que dice que todos somos polvo de estrellas, ya que todos los elementos químicos más pesados que el helio se producen en las estrellas", ha apuntado uno de los autores, Romero Wyse. "Pero todavía no sabemos por qué las estrellas se forman donde lo hacen", ha añadido, para apuntar que "este estudio da nuevas pistas sobre el medio interestelar con el que las estrellas se forman".

En particular, los investigadores se centraron a la hora de elaborar los mapas en una característica misteriosa de la luz de las estrellas, una peculiaridad llamada difusión de bandas interestelares. Analizándolas, los astrónomos obtienen información importante acerca de la composición de los materiales espaciales que la luz se ha encontrado.

Este sistema se descubrió en 1922, entonces, las fotografías captaron líneas oscuras que indicaban que algunas luces de las estrellas habían "desaparecido" y que algo en el medio interestelar entre la Tierra y la estrella estaba absorbiendo la luz. Desde entonces, los científicos han identificado más de 400 de estas bandas interestelares difusas, pero los materiales que causan las bandas son un misterio.

Al respecto, los investigadores han especulado que la absorción de luz de las estrellas que crea estas bandas oscuras apunta a la presencia de inusuales y grandes moléculas complejas, pero la prueba de esto ha sido difícil de conseguir.

La naturaleza de este material desconcertante es importante para los astrónomos, ya que podría proporcionar pistas sobre las condiciones físicas y la química de estas regiones entre las estrellas. Dichos datos sirven como componentes críticos en teorías sobre cómo se forman las estrellas y las galaxias.