Las autoridades sanitarias estadounidenses anunciaron hoy que cuentan con más de 50 expertos en la región afectada por el ébola, mientras mantienen en máxima alerta el Centro de Operaciones de Emergencia en Atlanta (EE.UU.), con el apoyo de más de 350 especialistas.

"Mantenemos la promesa que hicimos a las personas de África Occidental, a los estadounidenses y al mundo de que los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) aumentarían rápidamente sus esfuerzos para ayudar a poner bajo control el mayor brote de ébola de la historia", indicó hoy su director, Tom Frieden.

El funcionario señaló que dicho grupo de expertos en la zona afectada trabaja las 24 horas al día 7 días a la semana junto a autoridades locales y a la Organización Mundial de la Salud (OMS) para identificar y aislar a las personas infectadas con el virus.

"Sabemos cómo detener el ébola. No será rápido ni fácil, pero estamos trabajando juntos con nuestros socios estadounidenses e internacionales y el liderazgo de los países (africanos afectados), y juntos lo vamos a lograr", aseveró Frieden.

Los CDC han enviado a 55 expertos a África Occidental para luchar contra el peor brote de la historia, que hasta ahora ha causado la muerte de más de mil personas.

Hasta ahora hay desplegados 14 en Guinea, 18 en Liberia, 16 en Sierra Leona y 7 en Nigeria, y se espera que al menos 60 expertos de los CDC permanezcan en la zona mientras controlan la crisis.

"Nuestro principal objetivo es poner fin al sufrimiento de tantos y a la vez desarrollar allá una infraestructura de salud pública para ayudar a prevenir brotes futuros", declaró Inger Damon, médico que lidera la respuesta de los CDC contra el ébola.

De acuerdo con los CDC, el principal objetivo de los expertos en este momento es detener el avance del brote y para ello se están dando a la tarea de encontrar a todas las personas infectadas e identificar a todos sus contactos.

Las personas que puedan haber sido expuestas al virus por estar en contacto con un enfermo, son observadas por 21 días para determinar si muestran síntomas de la enfermedad, y, en dado caso, son aisladas y sometidas a tratamiento.

Asimismo, los CDC han aumentado el nivel de vigilancia y la capacidad de hacer pruebas de laboratorio para determinar la presencia del virus en Estados Unidos.

Actualmente, los CDC y el Departamento de Defensa estadounidense son los únicos que cuentan con laboratorios con la capacidad de llevar a cabo pruebas de diagnóstico de ébola.

No obstante, a partir de ahora los CDC agregarán más opciones a la Red de Laboratorios (LRN) y les facilitarán la tecnología necesaria para diagnosticar la enfermedad.