El delegado del Gobierno en Melilla, Abdelmalik El Barkani, defendió ayer que las fuerzas de seguridad actúan de acuerdo al criterio de "proporcionalidad" cuando tienen que hacer frente a los intentos de entradas masivas de subsaharianos a través del vallado.

En rueda de prensa ofrecida junto al coronel jefe de la Guardia Civil en Melilla, Ambrosio Martín Villaseñor, tras los dos asaltos registrados el jueves, aludió a la "conflictividad" que se ha generado y dijo que la desesperación de los inmigrantes no debe ser excusa para justificar el acceso con fuerza.

Al hilo de algunas críticas surgidas por la actuación policial, recordó que la ley permite a las fuerzas y cuerpos de seguridad el uso de material "reglamentario", incluidos los aerosoles, que se utilizan siempre de acuerdo a los principios de proporcionalidad,

Preguntado por el uso de un extintor por parte de uno de los agentes, señaló que se debió a que un inmigrante portaba un mechero con el que, poco antes, prendió una prenda que a punto estuvo de alcanzar a los agentes.

"Tal vez tendría que haber soplado", ironizó el delegado, quien insistió en que lo que hace el agente es "apagar la llama de un mechero" para preservar la seguridad de los inmigrantes y de los guardias civiles.

El delegado también quiso dejar claro que no se produjeron devoluciones en caliente de los inmigrantes encaramados, ya que no se puede devolver a alguien que no ha entrado a territorio español y lo que se hace en estos casos es esperar a que bajen. El Centro de Estancia Temporal (CETI) acoge tras la última entrada masiva a 1.900 personas.

Sobre la "moda" de encaramarse, indicó que lo que buscan los inmigrantes es atraer la atención de los medios de comunicación, sobre todo, tras el debate interno surgido en España respecto al uso de material antidisturbios y a la forma de actuar de las fuerzas de seguridad.

Por su parte, el diputado del PSOE Ramón Jáuregui instó al Gobierno a hablar con Marruecos para resolver los incidentes en la frontera de Melilla.