La ONU confirmó ayer que el Gobierno y los rebeldes sirios han alcanzado un acuerdo humanitario para evacuar a los civiles del casco viejo de la ciudad de Homs y anunció que la ayuda humanitaria ya está lista para su distribución en esa zona.

Naciones Unidas señaló su satisfacción por las informaciones sobre la "pausa humanitaria" que permitirá la salida de civiles y la entrada de ayuda, y dijo que junto a otras organizaciones ha preparado alimentos y otros suministros médicos y equipos básicos en las afueras de la ciudad.

Esa ayuda se enviará "de forma inmediata una vez que las partes den la luz verde" sobre la seguridad de su transporte, y el personal humanitario también está listo, indicó un portavoz de Naciones Unidas en un comunicado.

Valerie Amos, subsecretaria general de la ONU para Asuntos Humanitarios y coordinadora de la ayuda de urgencia, señaló que esta tregua humanitaria permitirá la salida de los civiles y la llegada de ayuda "esencial" para aproximadamente 2.500 personas.

La responsable de Naciones Unidas "seguirá de cerca los acontecimientos", agrega la nota.

Amos insistió en que es necesario en que la ayuda pueda entrar "sin obstáculos y de forma continuada", a fin de que los trabajadores humanitarios puedan socorrer a millones de personas atrapadas en zonas asediadas en toda Siria.

La confirmación de la ONU llegó después de que las autoridades sirias anunciaran ayer que la evacuación de los civiles del asediado casco viejo de la ciudad de Homs, en el centro del país, se producirá en breve, según la agencia de noticias oficial Sana.

Por otra parte, al menos 246 personas han muerto en los últimos cinco días por los ataques aéreos con barriles explosivos lanzados por la aviación del régimen sirio en la ciudad septentrional de Alepo, informaron redes de activistas.

El activista de la Red Sham en Alepo, Abu Muyahed, dijo a Efe por internet que las fuerzas gubernamentales prosiguieron ayer los bombardeos con barriles explosivos lanzados desde helicópteros contra las zonas bajo control de los opositores. Abu Muyahed destacó que es casi imposible protegerse de este tipo de ataques, de ahí el gran número de víctimas.

Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, entre los cerca de 250 muertos de estos días hay 73 menores, 24 mujeres y 11 combatientes opositores, que fallecieron por los ataques aéreos contra los barrios del este de Alepo, la segunda ciudad de Siria.

El Observatorio, con sede en Londres y una amplia red de activistas sobre el terreno, achacó la responsabilidad de los bombardeos al general del ejército sirio Suhail Hasan, que dirige la operación para tomar el control de esas zonas, en manos de los rebeldes.

Por su parte, los insurgentes hicieron hoy un llamamiento en internet a todos sus seguidores en los cuarteles para que se movilicen y acudan a los frentes de batalla.