El Gobierno italiano expresó hoy su deseo de que "se restablezcan las condiciones" para que las empresas que participan en la ampliación del Canal de Panamá puedan proseguir las obras y que concluyan en un breve plazo de tiempo, pues suponen un proyecto "estratégico" para la economía mundial.

En un comunicado, el Gabinete del socialdemócrata Enrico Letta informó además de que ha activado sus contactos con los Gobiernos de los países con intereses en el proyecto y con las entidades que financia la ampliación del Canal, en la que participa la constructora italiana Salini Impregilo.

"El Gobierno sigue con la máxima atención el contencioso sobre las obras de ampliación del Canal de Panamá, en el que están implicadas empresas italianas y otras compañías europeas, y desea que se restablezcan las condiciones para que tales empresas puedan seguir con su obra y completar en un breve plazo de tiempo un proyecto de alcance estratégico para la economía mundial", dice la nota.

"Para tal fin, se han activado contactos con los Gobiernos de los países interesados y las instituciones financieras internacionales y europeas que financian el proyecto", concluye.

La compañía italiana Salini Impregilo es socia del Grupo Unidos por el Canal (GUPC), que lidera la española Sacyr, y hasta el momento mantiene la posición más rígida sobre las condiciones para evitar la paralización de las obras el próximo lunes.

El GUPC considera que en la obra se ha producido un sobrecoste de unos 1.600 millones de dólares, lo que la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) no admite.

El pasado 8 de enero, el consejero delegado de Salini Impregilo, Pietro Salini, exigió a la ACP el reconocimiento del pago de 1.000 millones de dólares adicionales al precio original de la obra para la finalización de la misma o bien la financiación de 500 millones de dólares, más la "consolidación" de los anticipos ya hechos.

Salini afirmó que la postura de la ACP "es del todo inaceptable e incluso ridícula en la actual dramática emergencia", pues, en su opinión, la Autoridad del Canal tiene aún a su disposición todos los fondos del plan financiero de contingencias e imprevistos que no ha utilizado, y "éste es el momento" de hacerlo.

Según la compañía italiana, la ACP pretende que el consorcio continúe su trabajo y devuelva en los próximos meses "todo el dinero percibido como anticipo y sin recibir a continuación nada por el pago de las obras que quedan por realizar, por las que el consorcio tendría que sufragar, sin embargo, todos los costes".

Ayer, jueves, la Autoridad del Canal dijo que han contactado con empresas distintas a las encargadas de la ampliación para enfrentarse a una eventual suspensión de las obras el lunes próximo, aunque no pierden la esperanza de que el consorcio GUPC recapacite y retome los trabajos "a toda marcha".

El administrador de la Autoridad del Canal de Panamá (ACP), Jorge Quijano, se reservó los nombres de esas empresas y dijo que están "preparados para la eventualidad" de que se paren las obras por parte del GUPC, que ganó la licitación en 2009 por 3.118 millones de dólares y que ha realizado ya el 65 % del proyecto.