El Centro Logístico de Ayuda Humanitaria de la Cruz Roja en Canarias mandará 46,7 toneladas de herramientas para efectuar reparaciones de emergencia a Filipinas en el primer envío que destina al país para contribuir a solventar los daños del tifón "Haiyan", que partirá esta semana de las islas.

Un total de 4.099 paquetes familiares de herramientas que incluyen cada uno diversos utensilios, desde una azada o un serrucho a clavos o tornillos, conforman ese envío, distribuido entre tres contenedores que ya se encuentran embarcados en el Puerto de La Luz y de Las Palmas a bordo de un buque que tiene previsto zarpar rumbo a Filipinas el viernes, han avanzado hoy desde dicho centro.

Según ha explicado su responsable de logística, Enrique Suárez, esas herramientas se distribuirán entre familias de damnificados por el tifón con el objetivo de que puedan hacer trabajos de rehabilitación de sus hogares, en muchos casos infraviviendas de madera u otros materiales, o construir algún refugio provisional, en los supuestos en que sus casas hayan quedado irrecuperables.

"Contribuir a que la gente vaya recuperando la normalidad de su vida" es, en palabras de Suárez, la finalidad última de este envío de ayuda, que se suma a otras iniciativas de apoyo que ya se han puesto en marcha a los perjudicados por el "Haiyan", que hace un mes asoló Filipinas, dejando unos 10.000 muertos, según los cálculos de las autoridades locales.

El representante del Centro Logístico de Ayuda Humanitaria de la Cruz Roja en Canarias, con sede en Las Palmas de Gran Canaria, ha explicado que este envío lo lleva a cabo la Cruz Roja Española, que ya ha mandado otros anteriores para los damnificados por el tifón de Filipinas pero no desde las islas, en coordinación con la federación internacional de la organización humanitaria.

Y ha añadido que, en el marco de esa coordinación, está previsto que los paquetes de herramientas viajen hasta Manila y que, una vez llegados allí, se haga cargo de su distribución la Cruz Roja de Filipinas.

En ese país trabajan actualmente tres voluntarios canarios de la Cruz Roja, dos procedentes de Tenerife y uno de Lanzarote, que han viajado hasta allí para ayudar a las víctimas del tifón como especialistas en el tratamiento de agua, a fin de garantizar un suministro potable a la población en distintas zonas.