Más de un centenar de líderes demócratas y republicanos del Congreso de EEUU tienen planes de donar sus salarios durante el cierre parcial de la Administración federal, en solidaridad con los empleados públicos afectados por la disputa presupuestaria.

En sendos comunicados y a través de las redes sociales, los legisladores se han comprometido a donar sus salarios o rechazar sus pagos mientras dure el cierre parcial de la burocracia federal, que afecta a unos 800.000 empleados públicos.

El punto muerto en las negociaciones presupuestarias entre la Casa Blanca y el Congreso hace temer que el cierre parcial de la Administración federal pueda durar varias semanas.

Por ley, tanto el presidente Barack Obama como el vicepresidente Joe Biden, que reciben un salario anual de 400.000 dólares y 230.700 dólares, respectivamente, quedan exentos de la suspensión de salarios, al igual que los miembros del Congreso, porque sus pagos provienen de fondos obligatorios.

En cambio, los fondos discrecionales, que se utilizan para financiar la mayoría de las operaciones de la burocracia federal debe ser aprobados por el Congreso en cada año fiscal que abarca de 1 de octubre al 30 de septiembre.

Según el diario "The Washington Post", al menos 121 miembros del Congreso -60 republicanos y 61 demócratas-, han dicho que donarán su salario o rechazarán cualquier compensación acumulada durante las negociaciones para resolver la disputa sobre el presupuesto federal para el año fiscal 2014.

Entre los congresistas que se han sumado a este esfuerzo figura el propio presidente de la Cámara de Representantes, el republicano John Boehner, y su "número dos", Eric Cantor, y el líder de la minoría republicana en el Senado, Mitch McConnell, que han responsabilizado a la Casa Blanca por el punto muerto en las negociaciones.

El líder de la mayoría demócrata del Senado, Harry Reid, ha dicho que aparcará su salario en una cuenta especial, según su oficina.

Reid y McConnell perciben un salario anual de 193.400 dólares, mientras que Boehner gana 223.500 dólares anuales.

De promedio, los miembros del Congreso que no tienen cargos de liderazgo han ganado 174.000 dólares anuales desde 2009, por lo que durante el período del cierre parcial del Gobierno podrían dejar de recibir alrededor de 476 dólares diarios.

También figuran los senadores demócratas Barbara Boxer, Dianne Feinstein, Kay Hagan, Heidi Heitkamp, Tim Kaine, Al Franken, Ed Markey, Sherrod Brown, Chris Coons, Tom Carper, y Amy Klobuchar. Del lado republicano están los senadores Bob Corker, Lindsey Graham, John Cornyn, Ron Johnson, Kelly Ayotte, Tom Coburn, Mike Crapo, y Mike Enzi, entre otros.

La lista de miembros de la Cámara de Representantes incluye a los demócratas Joaquín Castro, Pete Gallego, Michelle Lujan, Ron Barber Jared Polis, y a los republicanos Raúl Labrador, Darrell Issa, y Rodney Davis.

Conscientes del problema de imagen ante la opinión pública, la mayoría de estos congresistas han decidido donar sus salarios a diversas causas y organizaciones caritativas.

Graham, por ejemplo, difundió un vídeo de 40 segundos en YouTube en el que consideró que no merece recibir un salario "mientras a otros empleados federales se les priva de la capacidad de ir a trabajar".

"Voy a tomar mi salario durante el cierre parcial del Gobierno y lo donaré al Proyecto para Guerreros Lesionados", explicó Graham.

Los republicanos han propuesto aprobar medidas para financiar sólo algunos programas federales, pero la Casa Blanca insiste en que esa propuesta es irresponsable y que el Congreso debe otorgar los fondos para la reapertura del Congreso.