El papa Francisco ha pedido que se rece por las víctimas del naufragio de una embarcación con cerca de 500 inmigrantes a bordo ocurrido hoy frente a las costas de la isla italiana de Lampedusa y en el que han muerto al menos 82 indocumentados mientras otros 250 se encuentran desaparecidos.

"Recemos a Dios por las víctimas del trágico naufragio", manifestó el pontífice a través de su cuenta en la red social Twitter.

Según explicaron los supervivientes de la tragedia, decidieron encender un fuego en la embarcación para permitir que ser localizados, puesto que no lograban contactar con los servicios de rescate con los teléfonos que llevaban.

La barcaza se incendió y muchos inmigrantes tuvieron que arrojarse al mar y en el caos consiguiente la embarcación acabó volcando.

La tragedia de hoy se suma a la ocurrida el pasado 30 de septiembre cuando trece indocumentados fallecieron después de haber sido obligados por los traficantes a saltar de la barcaza en la que viajaban a pesar de que no sabían nadar y había un fuerte oleaje.

El grupo de 200 inmigrantes fue obligado a tirarse al mar a pocos metros de playa del "Pisciotto" de la localidad de Scicli, en la provincia de Ragusa, Sicilia.

El pasado 10 de agosto, otros seis indocumentados, entre ellos un menor de edad, fallecieron al intentar alcanzar a nado la costa de Sicilia tras haber encallado el pesquero en el que viajaban junto a un centenar de inmigrantes procedentes de Siria y Egipto.