Los colegios oficiales de Ingenieros Industriales advirtieron ayer a la Universidad de La Laguna de que está ofreciendo el título de graduado en Ingeniería de la Edificación pese a que éste se encuentra suspendido cautelarmente por el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC).

A su juicio, la ULL comete desacato al ignorar el auto de junio de 2011 que acordó la suspensión cautelar de la denominación de estos estudios. La oferta del título a las tres promociones de alumnos que lo han estudiado desde su implantación los coloca, según los ingenieros, en "un serio problema", puesto que la Universidad no puede expedirles legalmente el título ni tampoco hacerlo con otro nombre que no sea "el legalmente vigente a la fecha de finalización de sus estudios".

El rector de la institución tinerfeña, Eduardo Doménech, se mostró sorprendido por esta reacción de los ingenieros industriales, dado que hace tiempo anunció a los dirigentes del colegio cómo procedería la ULL.

Lo que ha hecho la Universidad es seguir las recomendaciones de los servicios jurídicos del Ministerio de Educación y de la Abogacía del Estado, que interpretan que el fallo judicial no impide emitir el título si este no se basa en la resolución del rector -que es lo que ha sido anulado-, sino en la orden ministerial en la que se fundamenta la ficha técnica de los estudios.

De cualquier forma, Doménech aconsejó "tranquilidad" a los alumnos. "Las competencias profesionales no van a variar. Esto solo afecta al nombre", adujo.