EN LOS ÚLTIMOS AÑOs, cinco concretamente, el Instituto Volcanológico de Canarias ha venido desarrollando un ambicioso programa educativo en el archipiélago canario con el que dar a conocer varios aspectos de nuestra naturaleza volcánica: "Canarias: una ventana volcánica en el Atlántico". Este programa sobre el fenómeno volcánico cuenta con el apoyo del Ministerio de Economía y Competitividad, del Gobierno de Canarias, del Instituto Español de Oceanografía (IEO), de la Federación Canaria de Municipios (FECAM), del Instituto Geológico y Minero de España, de la Sociedad Volcanológica de España así como de los Ayuntamientos de los 88 municipios canarios. El contenido de esta iniciativa educativa se basa en las recomendaciones que en su momento la Asociación Internacional de Volcanología (IAVCEI) y la Organización de las Naciones Unidas para el desarrollo de la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) realizaron tras la trágica erupción del Nevado del Ruiz, en Colombia, en noviembre de 1985. Así se proyectan las películas "Comprendiendo los peligros volcánicos" y "Reduciendo el riesgo volcánico", editadas por dichas entidades, y en una tercera jornada se centra en la presentación del fenómeno volcánico y la gestión del riesgo en Canarias. La Declaración del Milenio persigue fundamentalmente incrementar el conocimiento y la sensibilidad social sobre los temas relacionados con las Ciencias de la Tierra para afrontar con garantías los retos que nuestro planeta tiene planteados en el nuevo siglo y, en consecuencia, las sociedades que en él habitamos. Siguiendo estas directrices, "Canarias: una ventana volcánica en el Atlántico" pretende contribuir a la reducción del riesgo natural más específico de esta comunidad, el volcánico, dado que este Archipiélago es la única región volcánicamente activa del territorio nacional. Este programa educativo tiene por objeto informar y educar a la ciudadanía que reside en Canarias sobre los diversos peligros volcánicos derivados de la propia actividad volcánica y las diversas acciones que la sociedad debe materializar para la reducción del riesgo volcánico. Hasta la fecha, contabilizamos más de 15.000 asistencias, lo que pone de manifiesto la trascendencia de este tipo de iniciativas enfocadas al público general. En un esfuerzo sin precedentes en materia educativa en este campo, hemos conseguido transmitir un conocimiento fundamental sobre la realidad de nuestro territorio, aumentando así las capacidades de la ciudadanía con respecto al fenómeno volcánico.