El consejero autonómico de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas, Juan Ramón Hernández, aseguró ayer en el pleno del Parlamento que el nuevo acuerdo pesquero entre la Unión y Mauritania podría suponer que 3.000 personas pierdan su empleo en las Islas. En respuesta a una pregunta de la diputada del grupo nacionalista Esther Nuria Herrera acerca de las consecuencias del citado acuerdo, Hernández dijo que los ingresos en la flota podrían llegar a una reducción en un 40%. El acuerdo se firmó el 26 de julio y debe ser ratificado pero ha comenzado a aplicarse y la flota afectada será sobre todo la de cefalópodos y el puerto más perjudicado el de La Luz y Las Palmas, señaló el consejero. Efecto negativo El consejero canario insistió en el acuerdo de pesca adoptado entre la Unión Europea y Mauritania es "inviable" y tendrá un "efecto negativo" sobre el sector extractivo y los subsectores económicos que realizan actividades complementarias en el puerto de La Luz y Las Palmas. Hernández denunció que la incidencia del nuevo tratado con Mauritania sobre la flota cefalopodera y la flota pelágica que opera en Canarias, es "muy negativa", ya que la primera categoría desaparece debido a que no se permite la modalidad de pesca de cefalópodos hasta que informes científicos indiquen a posteriori que es posible otorgar licencias. Para la segunda, se establece la obligatoriedad de descarga en los puertos mauritanos. El consejero defendió la importancia de mantener activa esta flota, como mínimo con un "status" similar al que tenía en el acuerdo en vigor hasta el 31 de julio de 2012, debido a su importancia respecto a los volúmenes de descarga que producía en el puerto de Las Palmas.